Ayer el presidente del Barcelona, Joan Laporta, señaló que tenía "las manos limpias" y que era "demagógico" decir que había "desgobierno" en el Barcelona. Hoy el socio Oriol Giralt, impulsor de la moción voto de censura contra Laporta, ha mostrado su dureza en una rueda de prensa.

Le ha tachado de "mentiroso" y le ha acusado de "haberse cargado el mejor equipo del mundo" cuatro días antes del voto de censura. A Giralt le ha sentado mal que Laporta dijera que el que fuera vicepresidente deportivo del club, Sandro Rosell, estaba tras la moción de censura. Le pidió pruebas en un tono vehemente.

Giralt señaló que esa afirmación "es una barbaridad, sí que puede realizar actividad ordinaria", subrayó.

"A partir del día después del referendo, se tendrá que proteger a la junta, porque esta moción aportará paz social al club. Al final, la directiva me agradecerá esta iniciativa, porque se habrá estabilizado el Barça. En Navidad me enviará una botella de cava", concluyó.