El entrenador del Valencia, Quique Sánchez Flores, afirmó que los objetivos de la temporada estaban cumplidos, ya que el equipo se marcó alcanzar la cuarta plaza y superar la primera fase de la Liga de Campeones y lo ha conseguido, a pesar de que al final del encuentro que perdió ante el Villarreal (2-3) escuchó algunos silbidos.

"Los silbidos en contra, pero también los aplausos que se escucharon para acallarlos, son algo que se puede dar. Yo me limito a decir que soy respetuoso con ellos, aunque cuando se consiguen los objetivos de la temporada, los cánticos duelen", dijo Quique, quien justificó las críticas del público a algunos jugadores en la tensión que se vive en estos momentos.

"Hemos conseguido nuestro objetivo, pero somos ambiciosos y queríamos más, aunque el objetivo, salvo gran sorpresa, está conseguido y con las adversidades que hemos tenido pensamos que se han conseguido cosas importantes", indicó.

"Estamos tristes porque no es lo que esperábamos y ni siquiera viendo el desarrollo del juego podemos pensar que merecimos perder. Hemos hecho un partido bueno por fases. Hemos ganado en posesión y en desacierto y ellos lo han aprovechado en un partido muy accidentado. Nos vamos pensando que no merecimos perder", agregó.

"Con la desgracia de la temporada, hemos luchado con pocas armas, pero estoy tranquilo. Estoy en la realidad, después de cada partido hablo con el presidente y eso es lo que me importa. No vivo de otras cosas ni de comentarios", manifestó.