El Real Madrid ha cerrado una temporada para olvidar en la que no ha ganado ningún título y ha dejado una pobre imagen tanto en LaLiga como en la Champions y la Copa. Las consecuencias del desastre empiezan a vislumbrarse en lo que respecta a la composición de la plantilla de la próxima temporada.

El equipo que preside Florentino Pérez presentará novedades, y una de ellas puede ser la salida del capitán Sergio Ramos, quien ha pedido la carta de libertad para firmar un contrato multimillonario con un equipo chino.

Florentino Pérez admitió que se reunió con Ramos, pero también reconoció que el Madrid no puede permitirse que su capitán abandone gratis el equipo, lo que convertirá el caso en uno de los culebrones del verano.

El dirigente se enfrenta así a un nuevo caso Casillas, ya que el excapitán del equipo blanco se ganó la consideración de leyenda madridista pero abandonó el equipo en 2015 por la puerta de atrás para poner rumbo al Oporto.

Las últimas temporadas del jugador en Madrid fueron un tormento para Casillas, ninguneado por Mourinho y relegado al banquillo. Su malestar llegó a tal punto que ya en 2014 se comenzó a especular con su posible salida del equipo merengue.

Al igual que entre Florentino y Casillas, la relación del dirigente con Sergio Ramos se ha deteriorado con el paso del tiempo, especialmente, por los últimos resultados y los rumores sobre las grandes fichas que firmarán los futuros fichajes del Real Madrid. Esto, unido a la jugosa oferta que el camero ha recibido de un equipo de la Superliga China hacen que el conflicto esté asegurado.