Raikkonen fue el protagonista inesperado del Gran Premio de Australia de Fórmula 1. A los mandos del Lotus, el finlandés se impuso en Albert Park a los dos pilotos que a priori deben luchar por el campeonato, Alonso y Vettel.

La primera carrera de la temporada deja a Ferrari muy fuerte, con dos pilotos entre las cuatro primeras posiciones, y muy tocado a Mercedes con el abandono de Rosberg y la quinta posición de Hamilton. Tampoco disfrutó McLaren, que situó a Jenson Button en novena posición. Los Force India de Sutil y Di Resta realizaron mejor papel con la séptima y octava posición.

En medio de estas sensaciones opuestas, Red Bull. La escudería campeona del Mundo situó a Sebastian Vettel tercero, en el podio, pero con un sentimiento muy amargo. "Me ha sorprendido ver al Ferrari de Alonso adelantarme en una parada", dijo el alemán en el podio. Sin duda, tras salir desde la pole, esperaba un mejor rendimiento de un coche que acusó la degradación de los neumáticos. Peor lo tuvo Mark Webber, sexto, después de salir segundo en la parrilla.

El relevo se tomó en la vuelta 21. Hasta entonces la situación de carrera estaba dentro de lo normal. Alonso marchaba cuarto y la situación estaba dirigida por tres pilotos que en teoría debían caerse por su propio peso al entrar en boxes: Adrian Sutil (Force India), Raikkonen (Lotus) y Hamilton (Mercedes). Sólo el segundo aguantó el tipo.

Sutil no pudo aguantar el ritmo del Ferrari, Hamilton se vio superado por una maniobra de Alonso y Raikkonen mantuvo su posición gracias a la estrategia a dos paradas. Mientras, Vettel continuaba sufriendo la degradación de los neumáticos.

La cara del piloto alemán de Red Bull lo decía todo tras la carrera. Cabizbajo, reconoció que el Ferrari de Fernando Alonso les había dado una lección y mostró su sorpresa por el adelantamiento del español en una parada. El asturiano entraba en el 'pit lane' en la vuelta 21 y conseguía recortar más de medio segundo en el siguiente giro. La escudería campeona de 2012 reaccionó tarde y dio muestras de debilidad en este inicio de campeonato.

Pero no todo es alegría dentro de Ferrari. Felipe Massa, compañero de Alonso, se enfadó por la radio por la apuesta de su equipo por el asturiano y no por él.