El entrenador del Manchester United, Alex Ferguson, explicó ante los medios sus sensaciones tres días después de caer en octavos de final de la Champions ante el Real Madrid en un partido envuelto en polémica por la expulsión de Nani.

Ferguson, que no atendió a los medios tras el partido, explicó que no se encontraba en condiciones de hacerlo, por lo que mandó a uno de sus hombres de confianza. “Mick era el hombre ideal para atender a la prensa. Es tranquilo y muy bueno, le usaré más”, afirmó.

Sobre la decisión del turco Cakir de mostrar la cartulina roja a Nani por una entrada a Álvaro Arbeloa, mostró su resignación: “Es difícil conservar la fe cuando pasan cosas como estas, pero no hay nada que hacer, es pasado. Es otro día en la historia del club, debemos superarlo y ayudarnos para seguir adelante".

Por último, destacó que no tiene ningún problema con Wayne Rooney y que el británico seguirá en el club la próxima temporada. “Necesita jugar, pero no hay ningún problema con él. Entendió mi decisión de no ponerle de inicio por razones tácticas”, concluyó.