Carolina Marín se encuentra ya en Vietnam para competir en el Yonex Sunrise Vietnam Open 2019. Para la onubense es un torneo muy especial, y no sólo porque allí es una auténtica heroína, sino porque será su primer torneo desde hace siete meses.

Marín tuvo que renunciar al Mundial de bádminton para garantizar que se recuperaba plenamente de la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha que se produjo en el masters de Indonesia. Por el camino, una operación y una larga rehabilitación en la que ella misma ha marcado los tiempos.

Su actuación en Vietnam será un buen espejo de hasta qué punto está en forma tras tantos meses de parón. En los próximos torneos tendrá que mostrar su ritmo competitivo, toda vez que su gran objetivo es llegar al 100% a los meses clave de preparación para los Juegos Olímpicos de Tokio, donde Marín defiende la medalla de oro lograda en Río 2016.

Durante estos meses, la exnúmero 1 del bádminton mundial ha estado realizando entrenamientos específicos para afinar su técnica y volver a tener las buenas sensaciones sobre la pista.