Athletic y Valladolid empataron en un igualado encuentro disputado en San Mamés. Los rojiblancos trataron de imponerse ante su público y lograron adelantarse gracias a un zarpazo de Iñaki Williams pasada la media hora de partido. Lejos de venirse abajo, los vallisoletanos buscaron el empate y lo lograron gracias a una desafortunada jugada de la defensa bilbaína que terminó en gol en propia puerta de Iñigo Martínez.

Las ocasiones se repartieron en ambas áreas en los primeros minutos. Entre ellas destacó una parada providencial de Unai Simón en un mano a mano con Ünal. No obstante, cuando peor lo estaba pasando el Athletic llegó el tanto de Williams, quien aprovechó su velocidad para hacerse con un balón largo y culminar una contra vertiginosa.

Los pucelanos no perdieron los nervios y siguieron trabajando sin correr demasiados riesgos en busca del empate. Este llegó tras un saque desde el costado de Nacho, que se le resbaló a Unai Simón y entró en la portería tras pegar en Iñigo Martínez.

El mazazo hizo despertar al Athletic, que se encomendó a su talismán Aritz Aduriz para resolver el partido. Sin embargo, fue Muniain quien tuvo la mejor ocasión a cinco minutos del final. Fabricó una gran jugada tras robar el balón en el círculo central y abrirse paso hasta la frontal, pero su potente disparo los despejó brillantemente Masip.

El empate dejó tocado a los vascos, que acumulan cuatro partidos sin ganar y terminaron el encuentro con la sensación de haber perdido dos puntos ante un Valladolid que suma su cuarto partido sin perder.