Era evidente que iba a centrar todas las miradas. El partido del Real Madrid ante el Betis se concibió, primero, como el gran homenaje a Toni Kroos, y después, como el último test antes de la final de la Champions.
Y así ha sido. El primer homenaje ha llegado antes incluso del comienzo del partido. Durante el calentamiento previo, toda la afición ha dedicado una cerrada ovación al alemán, que ha respondido con varios saludos. También tronaron los aplausos cuando el locutor mencionó su nombre en la alineación inicial. La última de Kroos en el Bernabéu.
Después, justo antes de que el balón comenzara a rodar, se ha desplegado un monumental tifo en la grada de animación. Cruzando varios anfiteatros, el mensaje "Gracias Leyenda", a modo de enorme banderín.
Pero no quedó ahí la cosa, quedaba lo mejor: tanto el Betis como el Real Madrid le han hecho un emotivo pasillo a Kroos, mientras todo el Bernabéu se ponía en pie. Y solo entonces ha empezado el partido, con los sentimientos a flor de piel.
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