Vicente del Bosque ha sido el elegido para presidir la Comisión de Supervisión, Normalización y Representación, el organismo que ha decidido crear el CSD para tutelar a la RFEF después de que el organismo federativo se haya visto involucrado en una investigación judicial.
"Es para mí un orgullo poder anunciarles que la persona que ejercerá la presidencia y la representación de esta comisión de normalización y de representación es Vicente del Bosque. Va a ser la cara, lo vamos a ver ya en esa próxima final de la Champions (femenina) que se jugará en Bilbao, durante la Eurocopa y, por supuesto, en los Juegos", anunció este martes Pilar Alegría, ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes.
La portavoz del Ejecutivo recordó que la comisión es «un órgano de tutela y de supervisión» con tres objetivos. «En primer lugar, representar al fútbol español, en segundo lugar, velar por la transparencia y el buen hacer del próximo proceso electoral a la vuelta de los Juegos, y en tercer lugar, afrontar con éxito los retos que tiene el fútbol español por delante, la Eurocopa, los Juegos y también al diseño del Mundial de 2030», concluyó.
Eso sí, la presencia de Vicente del Bosque en tales eventos no excluye que, a su vez, el presidente de la RFEF, bien sea Pedro Rocha -el actual máximo dirigente- o su sustituto si es sancionado, también estén presentes en el palco.
Así, en eventos como la final de la Champions femenina de Bilbao, la masculina si llega el Real Madrid, la Eurocopa y los Juegos, el exseleccionador compartiría palco con Rocha o el que fuera elegido como su sustituto, que ahora mismo sería su vicepresidenta primera, María Ángeles García Chaves.
Lo que sí está claro es que la labor de Del Bosque es de supervisión, no ejecutiva. Por poner un ejemplo, el salmantino no tendría poder de decisión en si renueva Luis de la Fuente –tal y como sucedió hace unas semanas-– pero si sería una figura de consenso para dictaminar si la RFEF puede acometer dicha renovación.
Su labor de mediación sería comparable a lo que sucedió en Oliva (Valencia) el pasado mes de septiembre, cuando las jugadoras de la selección española se negaron a jugar durante una concentración –antes de dos partidos de la Liga de Naciones– y hubo un cónclave hasta altas horas de la madrugada en el que estuvo presente Víctor Francos, entonces presidente del Consejo Superior de Deportes.
Así, con la figura de Del Bosque, además de los asesores "de reconocido prestigio" que estarán en su equipo, el CSD quiere realizar una supervisión constante de lo que sucede en la Federación Española hasta que se produzcan las elecciones el próximo 10 de septiembre y sin que llegue a ser una intervención, con lo que se evitan problemas con la FIFA y la UEFA.
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