La segunda jornada de los test de pretemporada de Fórmula 1 en Bahréin ha llegado a su fin y ha permitido desvelar mucha más información sobre el posible rendimiento de los monoplazas dentro de una semana, cuando arranque en la misma pista de Sakhir el Mundial 2024. Además, ha dejado una gran noticia para los intereses españoles, con Carlos Sainz liderando la tabla de tiempos y Ferrari demostrando que tienen mucho potencial.

Todo ello, como siempre, hay que cogerlo con pinzas. Desconocemos las cargas de gasolina de cada piloto o la configuración de sus coches, pero ha quedado patente que el SF-24 ha nacido bien y listo para correr. No en vano, Charles Leclerc dominó la sesión matutina (1:31:750) hasta que tuvo que ser cancelada por un problema en una alcantarilla cercana al piano de la curva 11 del circuito, y después Sainz destrozó todos los registros hasta el momento por la tarde.

Aunque el monegasco pudo rodar en ese tiempo extra vespertino que se otorgó para compensar la bandera roja de la mañana, el protagonismo lo acaparó Sainz, que logró un tiempo de 1.29.921. Un crono brutal, a dos décimas de la pole del año pasado, conseguido eso sí con el neumático C4 -más blando que el de la competencia, no se usará en la carrera-, pero igualmente impresionante para lo que se esperaba de los bólidos rojos.

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Nadie pudo acercarse siquiera a ese tiempo, con 'Checo' Pérez y su RB20 mejorando el tiempo de ayer de Max Verstappen (que no pilotó este jueves) y quedando a ocho décimas con las gomas C3. Sigue transmitiendo buenas sensaciones el Red Bull, el mejor del resto un día más exceptuando la exhibición de Sainz. 

Cerca del mexicano, en una horquilla de apenas unas décimas, ya aparecían muchos más pilotos. Si todo sigue así, ni Red Bull tendrá tanta ventaja, ni existirá diferencia alguna en la zona alta/media de la parrilla. Los más sorprendentes fueron los Mercedes, o más bien el W15 de Lewis Hamilton, que no rodó el miércoles y ya el jueves ha dado un pequeño adelanto de lo que puede lograr su coche.

Si el miércoles Red Bull lanzó una advertencia, que no sirvió para nada porque hasta Pérez superó ese crono, el jueves contestaron Ferrari, Mercedes y McLaren. Tanto Hamilton como Lando Norris se lanzaron a una vuelta veloz y superaron el tiempo del neerlandés con más o menos facilidad, e incluso un Visa Cash App RB como el de Daniel Ricciardo pudo acercarse a esos tiempos, por lo que la parrilla apunta a estar más compactada que nunca en el arranque del campeonato.

La beligerancia incrementó exponencialmente de un día a otro, y los equipos punteros comenzaron a sacar las uñas y a marcar territorio para dejar claro que gozan de las armas suficientes para amenazar por fin de verdad la hegemonía de Red Bull, cuyo bólido tuvo problemas de frenos y de motor en ambas sesiones. Todos... menos Aston Martin, que sigue sin llamar en exceso la atención con sus mejores tiempos. 

No es algo necesariamente negativo, ya que el foco principal de los test no está en analizar la velocidad a una vuelta de los monoplazas, pero chirría no ver en ese conato de pelea inicial a ningún piloto de la escudería británica. Fernando Alonso tuvo mala suerte con la bandera roja de la mañana y ya no rodó por la tarde, aunque mejoró su tiempo respecto al día anterior, mientras Lance Stroll sí que pudo pilotar bastante más (y mejor) que el primer día.

El canadiense acabó séptimo, con un 1.32.029 más que decente analizando el resto de datos del monoplaza, muy superior a cualquier tiempo registrado por Alonso. Sin embargo, la mejor noticia llegó en los ensayos de tandas largas, utilizando el neumático más duro (C1). En la comparativa con otros pesos pesados, el AMR24 demostró en 20 vueltas que es capaz, como el año pasado, de compensar gasolina y gomas para rodar cada vez más rápido, sin aparente degradación o exhibiendo la famosa 'degradación negativa'.

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Aun así, sin conocer cargas de combustible ni otros parámetros, insistimos en que es imposible sacar conclusiones sin formar parte de los equipos. Ese ritmo, en esas mismas circunstancias aparentemente, fue superior al de Hamilton, pero algo inferior a los de Pérez y Sainz. Sin embargo, Aston Martin todavía no ha lucido el potencial del coche a una vuelta como los demás... ¿Esconden algo?

Para acabar, la jornada nos dejó una imagen que hace salivar a los aficionados a la velocidad, con un simulacro de relanzamiento de carrera en el que Hamilton, Norris, Bottas, Pérez, Ocon y algún otro invitado comenzaron a correr entre ellos como si estuviesen ya inmersos en una carrera. Se notan las ganas de que comience el Mundial, pero aún queda un día más de test que promete ser apasionante, en el que todos mostrarán por fin sus auténticas cartas.