Entre lágrimas, completamente desconsolada, se retiró este lunes la tenista española Paula Badosa de su debut en el torneo WTA 100 de Dubai por culpa de una nueva molestia física. La española, cansada de las lesiones que acabaron con sus opciones en 2023 y con su arranque soñado en este 2024, volvió a parar cuando perdía por un set en contra en el duelo de primera ronda.

La pesadilla de Badosa continúa y este lunes no pudo ocultar las lágrimas de sufrimiento por ese calvario de lesiones que no le permiten exprimir su mejor nivel. Sentada, con la cabeza apoyada sobre un brazo y con lágrimas recorriendo sus mejillas, la catalana nacida en Nueva York culminó su participación en el cuarto torneo de este curso.

Su 'adiós' a Doha llegó tras la disputa de un solo set, el primero de un duelo culminado por 6-4 que permitió avanzar a la siguiente ronda a la jugadora suiza Lulu Sun, después de que los médicos no pudieran hacer nada por mejorar sus recurrentes problemas de espalda.

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La espalda, precisamente, fue el punto débil que la obligó a abandonar el curso 2023 en plena disputa de la segunda ronda del torneo de Wimbledon. Entonces la española optó por un tratamiento conservador para volver por todo lo alto este nuevo curso, pero la realidad es que tan solo ha podido disputar nueve partidos —dos de ellos no finalizados— en un arranque de 2024 que ha echado por tierra todo ese trabajo de puesta a punto y toda la ilusión por ver a Badosa peleando por llegar a las rondas finales.