El Atlético de Madrid venció (3-1) al Real Madrid este domingo en la sexta jornada de LaLiga, un derbi en el Cívitas Metropolitano que cortó la racha del equipo blanco, bombardeado por los rojiblancos con un doblete de Álvaro Morata. El ex del Madrid sacó los colores a la defensa de Carlo Ancelotti y también Antoine Griezmann, tres cabezazos sin marca en el área visitante para decidir el derbi de la capital. Los de Diego Pablo Simeone no negociaron esfuerzo ni contundencia y, el 3-1 en el primer minuto del segundo tiempo, ayudó a creer.
Tras un cinco de cinco, los blancos fallaron a la sexta y señalada jornada para ceder el liderato en favor de un FC Barcelona que venció el sábado al RC Celta. Más necesitado de puntos, el Atlético puso toda la carne en el asador y el Madrid volvió a pecar con un mal arranque de partido y un 2-0 en 18 minutos.
Los del 'Cholo', que con un partido menos suman ahora 10 puntos por los 16 del Barça y los 15 de su vecino, apretaron de inicio y encontraron los regalos que suele hacer el equipo de Ancelotti en este inicio de campaña. Morata remató solo en el área un centro de Lino para hacer el 1-0 a los cuatro minutos y el Metropolitano se vino arriba.
Con todo, el gol cambió algo las intenciones locales, ya que pasó a jugar más replegado, esperando una contra. El Madrid no aprovechó las pérdidas rojiblancas en un juego con mucho riesgo y, en otro despiste mayúsculo, con Rüdiger, Alaba y Fran García buscando culpable, Griezmann encontró otro cabezazo a la red (2-0).
Pese a hacer daño a los visitantes el segundo golpe, los de Ancelotti se metieron en el partido con una genialidad, recorte y disparo, de Toni Kroos, pidiendo el descanso los locales. Camavinga llegó a hacer el empate, anulado por un fuera de juego posicional de Rüdiger, y reclamaron también los blancos una roja a Giménez.
El descanso vino como agua de mayo a los del 'Cholo' y todo lo contrario a un Madrid que regresó con otra ausencia de marca en todo el área, de nuevo Morata rematando a gol de cabeza tras un milimétrico centro de Saúl (3-1). Todo el plan de remontada de Ancelotti se vino abajo y la empresa subió a una dificultad mayúscula ante un Atlético férreo.
No iba a regalar ni un centímetro el equipo local y, pese a la entrada de Mendy, Tchouameni, Joselu y Brahim, sin un Vinícius que se había recuperado, pero quedó fuera por gastroenteritis, al Madrid le costó un mundo llegar a la meta rival. Oblak tuvo poco trabajo, una de Rodrygo y otra de Brahim, y el Atleti dominó en armonía con el Metropolitano un derbi que da impulso a su campaña tras firmar el peor partido de la era Cholo la pasada semana.
La derrota contra el Valencia queda lejos para los rojiblancos, igual que el doloroso empate ante la Lazio en el inicio de la Champions, mientras las dudas asaltan al vecino. El Madrid, que llegó impoluto al derbi, enseña carencias en defensa, donde más le duele a Ancelotti, y menos soluciones de las que parecía tener, con Jude Bellingham jugándose la roja de la desesperación.
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