El podio del Gran Premio de Canadá de Fórmula 1 acumulaba muchos quilates y títulos mundiales. Allí estaban Max Verstappen, Fernando Alonso y Lewis Hamilton. Doce entorchados mundiales y tres pilotos ilusionados como niños tras lo visto sobre la pista.

Entre los más satisfechos estaba Alonso, cada vez más cerca de la ansiada victoria número 33: "Ha sido un carrerón, cada vez estamos más cerca de Red Bull", declaraba el asturiano, que protagonizó uno de los grandes momentos de la carrera con un viejo conocido, Lewis Hamilton. El pique entre los antiguos compañeros de McLaren revivió durante varias vueltas y al final fue Alonso quien se llevó el gato al agua tras un adelantamiento cocido a fuego lento.

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Tras la carrera, Alonso y Hamilton volvieron a dar una buena muestra de la relación que han ido construyendo con el paso del tiempo. El respeto y la admiración se ha ido imponiendo y tanto uno como otro no dudan en alabarse cuando tienen la oportunidad, aunque también suele volar alguna pulla para dejar claro que, compañeros sí, pero amigos no.

Una buena muestra de ello tuvo lugar ayer, cuando tanto uno como otro se encontraban en la zona mixta y a Fernando le preguntaron por la salida, en la que fue adelantado por Hamilton. El británico estuvo rápido al quite: "Su reacción fue algo lenta, son cosas de la edad", le soltó entre risas. El español encajó el golpe con deportividad y citó a su rival para la próxima carrera: "Austria, dos semanas". Uno y otro se rieron y la chanza terminó con un palmeo en la espalda de Alonso a Hamilton. Un fuerte palmeo.