Carlos Sainz lo tenía todo de cara para subirse al podio en Mónaco. Una buena posición de partida, un coche más rápido y, a priori, una estrategia ideal para terminar por delante de Esteban Ocon. Con una treintena de vueltas y varios intentos de adelantamientos, Ferrari se lo jugó todo a los boxes.

Después de amagar varias veces con meter al español para intentar que Alpine sacase de la pista a su piloto, y tras un toque del piloto de la 'Scuderia' con el monoplaza del galo, Ocon entró para cambiar los medios por los duros. Una vuelta después, la escudería italiana llamó a Sainz.

El 'pit-stop' del equipo francés había sido malo y había hecho perder al excompañero de Fernando Alonso dos segundos, lo que dejaba una oportunidad perfecta para el español de superar por fin a su rival y subirse virtualmente al podio.

Sin embargo, la entrada en boxes no salió como Ferrari esperaba y Carlos salió justo detrás del francés. Muy enfadado, el español recriminó a su equipo que le hubiesen hecho entrar y perder la oportunidad de pasar a Ocon.

"¿Por qué me habéis parado?", gritó por radio a su equipo, que le explicó que no habían entrado para intentar adelantar al Alpine, sino para proteger la posición frente a Lewis Hamilton, que había parado poco antes.

"¡No me importa Hamilton! Era jodidamente rápido", ha expuesto el español, que después se ha preguntado por qué Ferrari no ha llamado a Leclerc por la misma razón si era más lento que él. "Voy un segundo más rápido [que Leclerc]", ha sentenciado el madrileño.