Nico Williams ha decidido cerrar sus redes sociales tras recibir un aluvión de duras críticas este martes después de la eliminación del Athletic de Copa del Rey ante Osasuna, que se convirtió en el primer finalista del torneo del K.O. con un golazo de Pablo Ibáñez en la prórroga.

El futbolista de 20 años se convirtió en objeto de ataques en la derrota de su equipo por fallar varias ocasiones claras de gol, que hubieran significado la victoria y el pase a la final para los Leones, antes de que el conjunto rojillo empatase el duelo en el tiempo extra y se clasificase por haber ganado en la ida en El Sadar. Concluido el choque, los perfiles del jugador desaparecieron.

"Es normal que esté jodido, todo el equipo estamos jodidos, nos vamos a las puertas de otra final y no hay palabras. Estamos muy, muy tristes, muy jodidos, pero intentaremos levantar la cabeza y volver", apuntó su hermano, Iñaki Williams, tras el encuentro.

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El internacional por Ghana aseguró que "esto es fútbol" y empatizó con la situación del joven: "Yo, más que nadie, que en muchos partidos me ha tocado fallar, sé por lo que puede estar pasando mi hermano", apuntó. Y dejó claro que "esto le va a venir como aprendizaje" y es un momento para "esforzarse y seguir trabajando".

El delantero de la selección española chutó por encima de la portería de Sergio Herrera cuando San Mamés ya celebraba el segundo tras ver la jugada espectacular de su hermano por la banda derecha en el minuto 70. Un cuarto de hora después, Nico volvió a a fallar al recoger el rechace del disparo de Raúl García, lo que provocó que el estadio corease su nombre para animarle.