LaLiga está muy, muy viva aún. El Barça no supo aprovechar el tropiezo el día anterior del Real Madrid en el derbi y cayó de manera sorprendente (1-0) en su visita a un Almería serio ante el que los azulgranas se atascaron para completar su horrorosa semana, en la que han sido eliminados en Europa y le han dado esperanza a su máximo rival, ahora a siete puntos, en la Liga.

No tardó el conjunto andaluz en demostrar que tenía intención de plantar cara al catalán, y en los primeros minutos le discutió el dominio del partido. El Barcelona no era capaz de generar ocasiones, hasta que el Almería le cazó en una contra. Luis Suárez le puso un pase perfecto al espacio a El Bilal Touré y el delantero fusiló a Ter Stegen con un tremendo derechazo que dio en el larguero y entró. 

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No estaban cómodos los de Xavi, al que la apuesta por los cuatro centrocampistas esta vez no le estaba funcionando. Un remate acrobático de Baptistao lo mandó a córner Ter Stegen con apuros y un cabezazo de Ely se fue alto. 

El Barça se metió en el partido a base de tener el balón y fue acrecentando su dominio, pero sin ocasiones claras. Solo un centro al que no llegó Sergi Roberto generó algo de inquietud a un Almería perfectamente plantado en el campo y muy ordenado. 

Xavi movió no esperó y movió el árbol al descanso, pasando a un 4-3-3 con la entrada de Raphinha. Precisamente tras una jugada del brasileño llegó el primer acercamiento con peligro real del Barça, pero el remate de Gavi fue repelido por un defensor. Aunque la más clara llegó en un gran centro de Ferran al que Raphinha no llegó para empujar el balón a la red por apenas unos centímetros.

Xavi tuvo que tirar de experimentos ante las muchas bajas en ataque y las pocas variantes en el banquillo. Primero entraron Marcos Alonso y Araujo, después los jóvenes Pablo Torre y Ángel Alarcón.  Era lo que había. 

En los centros desde la izquierda de Ferran encontró el Barça su mejor arma. Uno de ellos, perfecto, lo remató Araujo entrando desde atrás, pero no conectó bien el remate y se perdió por poco. Precisamente Araujo, que lo remata todo por alto, se convirtió en la esperanza culé, pero dos remates suyos no encontraron la portería y los tres puntos se quedaron en Almería para sacar al equipo andaluz del descenso y dejar la Liga con mucha vida.