Mañana juega la Roja. La ilusión que ha transmitido el equipo desde el comienzo de su andadura en Qatar, hace que veamos al equipo de Luis Enrique más allá de semifinales, incluso con el pensamiento puesto en la final. Pero, tal y como dice Lucho, "vamos paso a paso y el siguiente escalón es contra Japón". En la memoria perdura el choque nipón contra España en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde los Samurái Blue cayeron en semifinales y permitieron a los españoles alcanzar una gran final contra Brasil. Pero se trataba de otro equipo dirigido por otro seleccionador, Luis de la Fuente, al que conocen bien algunos de los jóvenes integrantes de la actual selección española. 

Japón tiene un conjunto que se mueve en bloque y mañana veremos a las mejores individualidades que saldrán a flote a las órdenes de Hajime Moriyasu, cuyo objetivo confeso son "las semifinales". Takehiro Tomiyasu (Arsenal), Daichi Kamada (Eintracht), Takumi Minamino (Mónaco) o el aclamado Takefusa Kubo saldrán a jugar al ataque para permanecer en los puestos clasificatorios de octavos.

Una de las misiones principales de España pasa por tener el balón y evitar pérdidas absurdas, ya que los nipones son peligrosos a la hora de correr. Por lo tanto, las especulaciones giran en torno a la posible alineación de Luis Enrique.

Proteger a Sergio Busquets, con su tarjeta amarilla y su estado físico, sería lógico en este partido, para mover el ataque con Morata, quien ha sido suplente en los dos encuentros anteriores y su promoción como titular, daría otra perspectiva a las preferencias del seleccionador español.

Por otra parte, Ansu Fati, uno de los jugadores al que se le caen los goles y que puede dar mucho juego contra Japón, sigue siendo duda. Y es que la rodilla del jugador del Barcelona no está en su mejor momento como tampoco la de Gavi. Ambos jugadores podrían perderse este encuentro y reservarse para la fase de octavos.

La calidad de los del banquillo es igual o superior a los que han jugado en los encuentros contra Costa Rica y Alemania. No será el último partido del Mundial para España, por lo que los recambios, si se realizan, se verán horas antes del encuentro, tal y como nos tiene acostumbrados Luis Enrique.

España saldrá con todo su ataque, con toda su fuerza en el juego, pero si los de Lucho perdieran su partido frente a Japón, se quedaría con cuatro puntos en el grupo E, mientras que el equipo japonés tendría seis.

A España le valdría con un empate ante Japón para clasificarse, pero por su diferencia de gol podría avanzar hasta con una derrota. Japón se aseguraría la clasificación si le gana a España. Para pasar con un empate, Alemania y Costa Rica tienen que terminar también igualados. Si Costa Rica gana, se meterá en octavos de final, por lo que Alemania la victoria y que Japón no venza a España para meterse entre los 16 mejores.