Ya es oficial: Fernando Alonso es el piloto con la trayectoria más larga de la historia de la Fórmula 1. Desde que debutó en el GP de Australia de 2001 hasta este GP de Azerbaiyán de 2022 han pasado exactamente 21 años, 3 meses y 8 días, con lo que supera la duración de la trayectoria del heptacampeón Michael Schumacher.

El 'káiser, que al igual que Alonso tuvo un parón con una primera retirada de la F1, debutó en la categoría reina en el Gran Premio de Bélgica de 1991 y disputó su última carrera en el de Brasil de 2012: un periodo de 21 años y tres meses exactamente.

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La carrera de Alonso en Fórmula 1 aún tiene "otros dos o tres años más", según ha avanzado numerosas veces a lo largo de los últimos meses. En buena medida dependerá de lo que decidan en Alpine con Oscar Piastri, el probador del equipo, a quien quieren darle un asiento sí o sí para 2023. Si logran encajarle en Williams (como contraprestación a suministrarles motores Renault), Alonso podría seguir sin mayores problemas... salvo que decida él mismo irse.

A punto de cumplir 41 años (lo hará el 29 de julio), Alonso se siente perfectamente, tanto en lo físico como en lo mental. Eso hace que se vaya a convertir no sólo en un piloto con una longevidad propia de las décadas de los 50 o 60, cuando era habitual ver a pilotos cuarentones, sino también en el corredor con más Grandes Premios a sus espaldas. 

Salvo que se pierda alguno, llegará en el GP de Singapur a los 350 disputados por Kimi Raikkonen y se convertirá en el piloto con más carreras de F1 disputadas en Japón.