La segunda gran jornada de competición en los Juegos Olímpicos de Tokio termina con luces y sombras para la delegación española, con la sensación de que se escapa una medalla, pero de que todavía quedan muchas alegrías por llegar en los próximos días de la competición. 

Mireia Belmonte partía con muchas opciones de medalla en la final de los 400m. estilos pero se quedó a las puertas al acabar cuarta, a sólo 23 centésimas de la tercera clasificada. Además, en la madrugada pudimos disfrutar de la repesca en remo para parte del equipo español y el estreno de las 'Red Sticks', la selección femenina de hockey, ante Australia.

En tenis, Sara Sorribes, Carla Suárez y Garbiñe Muguruza hicieron pleno en el cuadro individual femenino. La propia Sorribes formó junto a Paula Badosa para conseguir también la victoria en dobles. Menos suerte tuvieron las parejas masculinas de Andújar/Carballés y Carreño/Davidovich, que no pudieron ganar.

Ya bien entrada la mañana del domingo, uno de los debuts más esperados fue el de Simone Biles con la primera rotación del equipo de gimnasia de Estados Unidos que terminó con susto -deportivo- tras una caída de la favorita que podría haber condenado sus opciones. Un susto peor dio la selección de baloncesto americana, que volvió a sufrir y cayó contra una Francia que reitera sus opciones a ser oro. 

Volviendo al equipo español, la selección de fútbol logró cosechar su primera victoria por 1-0 contra Australia, gracias a un postrero gol de Mikel Oyarzabal. También dejaron detalles positivos los equipos de hípica, con su pase a la final; el de waterpolo masculino, con una importante victoria contra Serbia; Lili y Elsa, ganando en voley playa; también María Xiao en tenis de mesa; y los piragüistas Elosegui y Chorraut, pasando a semifinales.