Luka Doncic, un MVP encubierto que habla con sus números y presencia en la cancha

Luka Doncic, jugador de los Dallas Mavericks.
Luka Doncic, jugador de los Dallas Mavericks.
EFE
Luka Doncic, jugador de los Dallas Mavericks.

Luka Doncic ha pasado de niño prodigio a simplemente prodigio. El chaval que maravilló en el Real Madrid y se coronó continentalmente con Eslovenia entró por la puerta grande en la NBA en 2018. En la mejor liga de baloncesto del mundo cerró la boca a los más agoreros y en su tercer año es uno de los favoritos a llevarse el MVP de la temporada.

“He tenido presión desde que era un niño, desde que jugaba en Madrid. Pero, honestamente, no creo que deba estar en la conversación del MVP este año”, sorprendió Luka Doncic recientemente, aludiendo a que la marcha de su equipo no es la idónea para que alguien sea considerado el mejor jugador de la temporada. “Para poder ser MVP debes estar en un equipo que esté colocado en los dos primeros puesto de una conferencia, ése sería mi criterio para elegir en este galardón”. Pero el galardón de MVP mira con atención a la actuación individual de un jugador, y ahí no hay discusión posible. La puesta en escena de Doncic, noche tras noche, es de quitarse el sombrero.

Las lesiones de LeBron James y Joel Embiid los han dejado fuera de la carrera por el MVP y suenan nombres Nikola Jokic, James Harden, Damian Lillard, Stephen Curry, Giannis Antetokounmpo… Sin embargo la marcha de los Dallas Mavericks (séptimos de la Conferencia Oeste) no debería ser suficiente para dejar fuera a Luka Doncic. Sus 28.6 puntos, 7.9 rebotes, 8.6 asistencias, 1 robo y 48.6% en tiros de campo hablan por sí mismos.

Además, Luka se ha encargado de desmontar otro argumento en contra para tenerle en cuenta como candidato al MVP como el tiro de tres. El líder de los Mavs ha ido mejorando su porcentaje de acierto a medida que avanzaba la temporada y en el mes de marzo firmó un 43.3% con 4.5 triples por encuentro. Para colmo es el tercer jugador de la NBA que más triples mete después de siete botes, cuando anota el 50% de los lanzamientos, y también gana partidos desde más allá del arco sobre la bocina.

“Ha sido un jugador con mucha confianza desde que llegó aquí. Tiene confianza, pero es humilde. Y es un tipo que siempre se mira en el espejo y es honesto consigo mismo. Eso es lo más importante”, declaró su entrenador Rick Carlisle cuando se le preguntó por Doncic tras una de sus últimas exhibiciones. Una confianza que ha demostrado durante toda su carrera profesional y que ahora en la NBA debería ponerle automáticamente entre los mejores de la Liga.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento