Quique Setién ha concedido una entrevista a 'El Periódico' en la que repasa los aspectos más destacados del Clásico, entre ellos, el comportamiento de su segundo, Eder Sarabia, siempre enérgico, que no gustó a los jugadores del Barça.

"Eder es un chaval que tiene un gran temperamento, que para muchas cosas nos viene fenomenal. Pero tiene que aprender a controlarse. Está en ello, trata de mejorar este tema porque ya hemos tenido situaciones de estas. Cada vez más esporádicas, pero es algo que no nos gusta", dice sobre su ayudante.

Setién asegura que conoce el carácter de su ayudante y que entiende que pueda molestar y dañar la imagen del club: "Estamos en el banquillo de un club al que representas y el comportamiento tendría que ser intachable. Es verdad que hay un momento aislado en el que te puede pasar cualquier cosa, te vuelves loco y te 'descerebras', pero esto hay que tratar de controlarlo".

Asegura que Sarabia está "preocupado" tras la polémica en la que las cámaras le cazaron criticando muy alterado a los jugadores del Barça durante su derrota en el Bernabéu. Un uso de las imágenes que el entrenador azulgrana califica de "lamentable y vergonzoso".

"Que los medios utilicen una cámara que te está siguiendo permanentemente en el banquillo es algo que se debería erradicar. Es algo que se debería acabar", comenta. Pese a todo, asegura Setién que ya han pedido disculpas por lo sucedido "a todos".

"Ya hemos pedido las disculpas que tenemos que pedir. Y sobre todo yo porque, al final, es culpa mía. Yo tengo que controlar estas cosas. No es cuestión de darle explicaciones a la plantilla. No estamos a gusto con estas cosas. Es un error que hemos cometido y debemos tratar de evitarlo", insiste.