La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, asistió este domingo a la final de la Supercopa de España, disputada entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid en el estadio King Abdullad de Yeda, en Arabia Saudí, sin cubrirse con el tradicional hiyab (velo), ni ocultar su cabello con un pañuelo, lo que fue interpretado como un gesto en favor de la igualdad en el país árabe. Díaz Ayuso, que no se cubrió ni en el palco de autoridades ni en el campo (durante la entrega del trofeo y las medallas), llevaba incluso las mangas de su vestido un poco remangadas.
La propia presidenta madrileña indicó tras el partido, a través de su cuenta de Twitter, que fue "un orgullo presenciar cómo Arabia Saudí da pasos para la igualdad", en referencia a que esta Supercopa ha sido la primera vez en que las mujeres han compartido espacio con los hombres en un estadio de fútbol en Arabia Saudí. "Final histórica de la #Supercopa2020 donde Madrid y España vuelven a ganar y demostrar la calidad de nuestro deporte a nivel mundial", añadió.
Final histórica de la #Supercopa2020 donde Madrid y España 🇪🇸 vuelven a ganar y demostrar la calidad de nuestro deporte a nivel mundial.
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) January 12, 2020
Un orgullo presenciar cómo Arabia Saudí da pasos para la igualdad. #HalaMadrid #AúpaAtleti pic.twitter.com/p0WP530ZZo
El gesto de Ayuso fue alabado tanto por compañeros de partido de la presidenta autonómica como por otros políticos. "Melena al viento, brazos al aire y compartiendo protagonismo en el medio del campo. Miles de mujeres obligadas a llevar velo, y miles de hombres que las obligan a cubrirse, viéndolo. Buen trabajo, @IdiazAyuso", escribió en Twitter la consejera de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera, de Ciudadanos.
Melena al viento, brazos al aire y compartiendo protagonismo en el medio del campo. Miles de mujeres obligadas a llevar velo, y miles de hombres que las obligan a cubrirse, viéndolo.
— Marta Rivera (@CiudadanaMartaR) January 12, 2020
Buen trabajo, @IdiazAyuso pic.twitter.com/TdEYotSVJm
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, afirmó por su parte que "esta noche @IdiazAyuso ha hecho más por los derechos y libertades de las mujeres que el feminismo de las bonitas y de los bonitos. Enorme", y el exdiputado y exportavoz de Ciudadanos en el Congreso Juan Carlos Girauta indicó: "Feminismo es lo que ha hecho hoy @IdiazAyuso"
Esta noche @IdiazAyuso ha hecho más por los derechos y libertades de las mujeres que el feminismo de las bonitas y de los bonitos. Enorme. pic.twitter.com/Aaebimx8SJ
— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) January 12, 2020
Feminismo es lo que ha hecho hoy @IdiazAyuso
— Juan Carlos Girauta (@GirautaOficial) January 12, 2020
Antes de la celebración del partido, Díaz Ayuso ya había asegurado que la celebración de la Supercopa de España en Arabia Saudí era un acontecimiento "histórico".
La presidenta madrileña consideró que es "bueno" que haya presencia de mujeres en todas las disciplinas deportivas, así como su presencia en eventos deportivos. "Partidos como el de hoy demuestran que países como Arabia Saudí, reconocidos por hacer lo contrario, ahora empiezan a abrirse porque hay por delante un futuro prometedor", dijo.
Ayuso añadió que la celebración de este torneo, unida al efecto del turismo, "va a demostrar" que las sociedades van probando la "igualdad" entre hombres y mujeres "prosperan siempre más". "Una Supercopa cómo esta es historia porque precisamente por fin entran por primera vez mujeres de manera libre a este estadio de Yeda", afirmó.
Desde hace dos años, las mujeres ya pueden conducir en Arabia Saudí, aunque sea difícil comprobarlo. También pueden asistir a los partidos de fútbol, pero debían hacerlo en familia, con sus maridos, y nunca por su cuenta en la zona habilitada para el público masculino. Siempre en su propio espacio.
Esta vez no hubo restricciones en el estadio para las mujeres, tal y como sucede aún en la mayoría de las situaciones de la vida cotidiana. En los restaurantes, en gran parte todavía, o en los bancos, se dividen. Hombres y mujeres son atendidos en mostradores distintos, mesas distintas, habitáculos distintos. No pueden compartir gimnasio, ni acudir juntos a la piscina. Ni siquiera en los hoteles de lujo.
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