José Luis Rodríguez Zapatero, confirmó hoy que la reforma del Estatut de Catalunya será objeto de enmiendas a su paso por el Congreso con el fin de que termine siendo una reforma "razonable".

Así respondió esta tarde a preguntas sobre las reformas estatutarias y, especialmente la catalana, que le plantearon Mariano Rajoy (PP), Gaspar Llamazares (IU-ICV) y Josu Erkoreka (PNV).

Zapatero defendió el marco constitucional para las reformas estatutarias y confirmó que la posición del Gobierno es respaldar la toma en consideración de la propuesta catalana, dado que llega al Congreso con el aval del 90 por ciento del Parlament.

Respeto para el Congreso

Zapatero confirmó que el PSOE presentará enmiendas al texto remitido desde Catalunya y que se introducirán cambios con el máximo consenso posible, todo ello desde "la confianza" en el marco constitucional y en los procedimient democráticos, y desde el respeto debido a la labor de las Cortes Generales. "La Constitución es un muro, sino la garantía de convivencia y democracia", proclamó.

Tras pedir que no se invoque  la división ni la confrontación entre españoles, invitó al PP a sumarse a ese proceso de "reformas razonables", garantizando que Catalunya y España seguirán juntos. Eso sí, indicó al PP que, si quiere contribuir a ese proceso, debería empezar por "dejar de meter miedo" a los ciudadanos.

Por su parte, Rajoy le reprochó haber creado "un problema" con un texto que no es una reforma estatutaria, sino un cambio profundo de la Constitución. "No ha estado usted a la altura de sus responsabilidades como presidente del Gobierno de España --enfatizó--. Nos ha creado un grave problema".