La Conselleria de Salud de la Generalitat ha empezado a aplicar la anunciada política de adelgazamiento de las cúpulas directivas de los hospitales. En el caso del Hospital Clínic de Barcelona se ha traducido en la destitución del consejero delegado, Raimon Belenes, y la gerente Anna Miró, ha confirmado el mismo consejero delegado, ex director del Instituto Catalán de la Salud (ICS).

El subdirector general del Clínic, Josep Maria Piqué, asumirá la tarea de dirección del hospital, en comunión con la directriz de Salud de adelgazar la figura de director ejecutivo en una persona y prescindir de adjuntos y consejeros delegados.

Los recortes para reducir el gasto sanitario catalán, que acumula un déficit de 850 millones de euros, también han llegado al Parc Mar Salut, donde el conseller Boi Ruiz dejará de ser su presidente, como ya ha sucedido también en el caso del ICS, han reseñado fuentes de Salud.

Así, en adelante el conseller saldrá de las presidencias de los centros y consorcios públicos donde los estatutos lo permitan, y asumirán este cargo expertos de reconocido prestigio que no recibirán remuneración alguna por ello.

La Conselleria de Salud ha querido dejar claro que el departamento "ni nombra ni cesa" a los altos cargos, sino que el criterio de adelgazamiento se lleva a los patronatos de los centros, y son éstos los que ejecutan esta decisión.