La presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romero, ha destacado "la victoria social" de la familia de Nagore Laffage, tras conocerse que el Tribunal Supremo ha confirmado la sentencia en el caso de la muerte violenta de esta joven de Irun y ha lamentado que no se haya estimado el recurso de casación interpuesto tanto por el Parlamento foral como por la propia familia, solicitando que estimara el asesinato en vez del homicidio en este caso.

En un comunicado, Romero ha destinado su "primer recuerdo" para Asun, Txomin y Javi, padres y hermano de la joven irundarra respectivamente, que "no han visto completado su deseo de justicia". "El segundo es para Nagore y todas aquellas personas que han apoyado tanto a su familia como a las mujeres en su derecho a decir que no y a una vida sin violencia", ha señalado.

La presidenta ha manifestado su "respeto" por la sentencia dictada por el Tribunal Supremo y ha asegurado que "en un Estado de Derecho, la familia de Nagore ha hecho un largo camino para conseguir más justicia, un camino ahora completado y, por eso, hay que respetar la sentencia dictada por los tribunales".

A su juicio, "pese a que el camino de la justicia haya acabado en una condena a Yllanes por la muerte violenta de Nagore, mediante la figura del homicidio, sí podemos decir que lo que ha ocurrido, gracias a la familia Laffage, es una revolución social en la sociedad guipuzcoana y vasca" ya que, finalmente, "se ha hecho visible la lucha social por el derecho de las mujeres a una vida sin violencia y en pro del derecho de las mujeres a la libertad sexual, de movimiento y, fundamentalmente, a poder decir que no".

En esa línea, ha asegurado que Yllanes "mató a Nagore de la manera más horrenda posible porque le dijo que no". "Y eso lo hemos gritado todos los iruneses y todos los guipuzcoanos y hemos conseguido que se sepa", ha remarcado.

Finalmente, Romero ha tenido un recuerdo "muy especial" para los padres y el hermano de Nagore, les ha mostrado su solidaridad en estos momentos y les ha agradecido "su generosidad" porque, según ha aseverado, "han guardado parte de su dolor para acompañarnos a todos, no sólo pidiendo justicia para Nagore, sino para todas las mujeres".