El virus informático de la desidia

Tras 24 horas de descontrol, por fin empiezan a paliarse los efectos del mayor ciberataque global de secuestro de datos. Todavía quedan 1.100 equipos infectados, pero ya lejos de los más de 50.000 ataques en 74 países que se llegaron a registrar este viernes.Sin embargo los ciberdelincuentes no han logrado su objetivo: sólo han cobrado rescates de una veintenade equipos. En total, habrían conseguido hasta ahora unos 7.500 euros.Mediante el envío de correos electrónicos infectados, llegaron a atacar a miles de empresas y corporaciones, y se saltaron la seguridad de una gran firma como Telefónica.En marzo Microsoft ya alertó del fallo de seguridad y publicó un parche para solucionarlo. Dos meses después los equipos infectados no habían sido actualizados.El país más afectado ha sido Reino Unido, que todavía intenta recuperarse del colapso de su sanidad pública. El virus afectó a más de 40 hospitales y a decenas de miles de pacientes. Cientos de operaciones suspendidas, ambulancias desviadas y pérdidas significativas de datos.