Se acabó la sensación de impunidad para los ladrones que atenazan a los turistas de las grandes ciudades. Una reforma en el Código Penal, pactada por PSOE y CiU, permitirá llevar a la cárcel a los rateros que roben varias veces, aunque el botín no llegue a los 400 euros (por encima de esta cifra se trata de un delito; por debajo, una falta y no se ingresa en prisión).

Será el juez el que interprete qué es reincidencia para enviar a un ladrón a la cárcel. Se han elegido los fines de semana y días festivos porque las cárceles, que acabaron 2009 con 76.090 reclusos, están menos saturadas en esas fechas.

Uno de los problemas para saber si alguien ha robado una o cien veces es que no existe ningún registro de faltas. Esta base de datos deberá estar en marcha en el plazo máximo de un año. Será central y a él podrán acceder todas las policías y los jueces, como pedía Barcelona para atajar la multirreincidencia. En él quedarán constancias de todos los hurtos.

Aumentan las penas

Se agravan las penas para grupos criminales (bandas de carteristas). Cometer faltas continuadas de hurto se castigará con cárcel de tres meses a un año. Si una persona acumula tres faltas (y no cuatro, como hasta ahora) se considerará delito. Además, se dictarán órdenes de alejamiento, de manera que si se quiebran se considera un delito que puede desembocar en la cárcel. En Barcelona, esta medida ya se ha aplicado.

Barcelona es la ciudad que más ha batallado para que la reincidencia no quede impune. En tres meses, los Mossos han arrestado a 1.200 ladrones de este tipo. En algún caso, un mismo ladrón acumuló 400 delitos en sólo un año. Este martes, por ejemplo, se dictó prisión para dos mujeres que acumulaban 172 arrestos.

La propuesta deberá aprobarse este miércoles en la Comisión de Justicia. La reforma del Código Penal será efectiva antes del verano.