El FC Barcelona encarriló este martes la eliminatoria de octavos de final de la Liga de Campeones, después de sufrir y empatar en el Mercedes Benz Arena ante un buen Stuttgart, gracias a un tanto del sueco Zlatan Ibrahimovic tras el descanso (1-1).

El equipo de Guardiola sigue sin recuperar el buen juego y volvió a mostrar su peor cara ante un equipo alemán bien plantado, con intensidad y que supo desquiciar el centro del campo azulgrana.

Aún así, el conjunto culé arrancó con la decisión que se le debe reclamar al mejor equipo del mundo, dominando el partido, y concentró en Xavi todo su juego (Pep le dio la titularidad en el último instante). Pese a ello, la movilidad de los de arriba era escasa y sólo Messi recibía balones en la banda derecha para intentar inquietar a los defensas del Stuttgart. El peligro no llegaba.

De hecho, se superaban los primeros veinte minutos de juego y los dos porteros (Lehmann y Valdés) se mantenían inéditos, algo que se prodigó varios minutos más. Para entonces, el balón ya no era de color azulgrana y el Stuttgart basaba todo su esquema en su defensa, para aprovechar después su velocidad al contraataque, algó que sí funcionó en el minuto 25: un centro de Gebhardt desde la banda derecha pilló desprevenido a Puyol en el segundo palo y Cacau batió a Valdés de cabeza.

El tanto desató al equipo alemán y destrozó el centro del campo y la moral del Barça. Para colmo, los de Guardiola seguían sin probar a Lehman, mientras Cacau y Hleb ejercían de estiletes. El bielorruso, en nómina culé, se apoderó de la banda izquierda y volvía loco a Puyol una y otra vez, aunque sus galopadas con centro no encontraban fortuna en los remates de Cacau y Trasch.

Treinta y nueve minutos después del comienzo, el Barça generó la primera ocasión clara, por medio de Messi, pero su disparo lejano fue rechazado mal por Lehmann y el balón acabó estrellándose en el palo.

Cambio de tercio, aunque no hubo remontada

El tono y el ritmo no cambiaron en exceso tras el descanso, aunque la tendencia se invirtió sólo siete minutos después. Ibrahimovic, desparecido y apático en el primer tiempo, aprovechó el rechace de Lehman a un disparo suyo dentro del área y consiguió batirle por bajo (1-1).

El panorama cambió algo tras el gol. Guardiola apostó por Henry, el Barça empezó a correr y el balón paso a ser de los dos equipos, aunque las ocasiones de peligro tampoco llegaron con fluidez: Ibrahimovic y Khedira pudieron marcar, pero el sueco no superó a Molinaro (otro de los destacados) bajo palos y el alemán fue frenado por Valdés.

Los últimos minutos no tuvieron dominador claro y el Barcelona pasó a dominar el juego y a preservar un resultado favorable de cara al partido de vuelta en el Camp Nou (17 de marzo). Ál final, todo salió medio bien.

Ficha técnica:

1 - Vfb Stuttgart: Lehmann; Celozzi, Tasci, Delpierre, Molinaro; Gebhardt (Rudy, 82), Träsch (Kuzmanovic, 58), Khedira, Hleb; Pogrebnyak (Marica, 63) y Cacau.

1 - FC Barcelona: Valdés; Puyol, Márquez (Milito, 58), Piqué, Maxwell; Touré (Henry, 54); Busquets, Xavi Hernández; Messi, Ibrahimovic e Iniesta.

Goles: 1-0: m. 25, Cacau, de cabeza a centro de Gebhard. 1-1: m. 52, Ibahimovic.

Árbitro: Bjorn Kuipers (Holanda) amonestó a Márquez, Busquets, Gebhard y Molinaro.

Incidencias: partido de ida de los octavos de final de la Liga de campeones, disputado en la Mercedes Arena de Stuttgart ante unos 40.000 espectadores.

Ciani pone en órbita al Girondins (0-1)

Un tanto del defensa central Mickael Ciani, en los últimos instantes del primer periodo dio el triunfo al Girondins Burdeos en terreno del Olympiacos (0-1), lo que deja al conjunto francés con pie y medio en los cuartos de final de la Liga de Campeones.

El gol, que llegó en un remate de cabeza tras un lanzamiento de falta lateral, representó lo que fue la primera mitad, en la que ambos equipos se midieron con cautela y precaución, mucho más de parte francesa, y en la que apenas se generaron ocasiones.