La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha lanzado en su página web una propuesta para cambiar la definición del Franquismo contenida en el Diccionario de la Real Academia Española. Considera  que la actual oculta la violencia de la dictadura y es un ejemplo de negacionismo.

Actualmente, el diccionario tiene dos acepciones para el término: "1. m. Movimiento político y social de tendencia totalitaria, iniciado en España durante la Guerra Civil de 1936-1939, en torno al general Franco, y desarrollado durante los años que ocupó la jefatura del Estado. 2. m. Período histórico que comprende el gobierno del general Franco".

Para la asociación, ambas acepciones ocultan "la violencia de la dictadura y los numerosos crímenes cometidos por quienes planificaron, apoyaron y lucharon por el éxito del golpe de Estado del 18 de julio de 1936".

"Definir el franquismo como un movimiento de tendencia totalitaria es ocultar la naturaleza extremadamente violenta del régimen, las numerosas violaciones de derechos humanos: los 113.00 desaparecidos, los 500.000 exiliados, los 400.000 detenidos ilegalmente", señala en su página web.

También excluye a "las decenas de miles de desterrados, torturados, las miles de mujeres humilladas públicamente, los miles de ciudadanos expulsados de sus trabajos y de sus puestos en la administración por sus ideas o los miles de niños robados de los brazos de las presas republicanas y entregados a familias del régimen", considera la asociación.

La definición "es un ejemplo de negacionismo", por lo que invita a los interesados a acuñar una nueva definición de la dictadura. Las propuestas pueden ser enviadas por e-mail a la asociación, que asegura que organizará una votación para seleccionar las mejores y enviarlas a la academia.

"Algo más que una tendencia"

El presidente de la asociación, Emilio Silva, ha señalado que desde que lanzaron la propuesta, este martes, han recibido unas 40 definiciones; seguirán recibiendo propuestas hasta antes de las Navidades. Dentro de unos días colgarán en su web algunas de ellas para que los internautas puedan ir votándolas y así seleccionar las que serán enviadas a la academia.

Para Silva, que la RAE defina al Franquismo como una "tendencia" es "bastante irreal". "Las víctimas desaparecieron por algo más que una tendencia". Como ejemplo, señala que al Nacionalsocialismo no se le define solo como una tendencia, sino que se resalta su carácter "fascista y antisemita".

Esta asociación no aglutina al resto de organizaciones para la recuperación de la memoria histórica que operan en muchas provincias españolas; su ámbito de actuación es estatal, pero no está por encima de las locales, sino que opera "como una más", explica el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Valladolid, Julio del Olmo.

La propuesta de la asociación, por tanto, no ha sido lanzada en común con las asociaciones locales, pero la considera "válida" y necesaria para encontrar una explicación histórica más acorde con los hechos.

En España, señala, pareciera que el proceso del Franquismo fue diferente a los totalitarismo que se dieron en Alemania e Italia, y de hecho se mantiene la explicación fraguada durante la dictadura. Su actual definición en el diccionario oculta "que hubo la sistemática eliminación física del contrario" para "imponer una dictadura pura y dura".

La RAE no aceptará "presiones"

Por su parte, la Real Academia Española ha asegurado que estudiará "con calma" la propuesta de cambiar la definición de Franquismo, pero "no actuará por presiones" sino "estudiando tranquilamente las cosas", ha señalado su director, Víctor García de la Concha.

La Academia revisa el Diccionario "de manera sistemática y por zonas", y cada propuesta que hace la envía "a todas las demás Academias de la Lengua Española" porque el Diccionario "es una obra común", ha explicado el director.

Además, también estudia las propuestas que llegan "de continuo", formuladas por ciudadanos particulares o por entidades de todo tipo. El director indicó que la Academia aún no ha recibido la propuesta de la asociación, y cuando llegue se estudiará "con un poco de calma".

En este sentido recordó que "la Academia no actúa por presiones, sino que lo hace estudiando tranquilamente las cosas y consultándolas serenamente, por encima de los avatares y de las circunstancias que puedan concurrir".