El Gobierno británico ofrecerá 500 libras (550 euros) a aquellos vecinos que delaten de forma anónima a quienes ocupan ilegalmente una vivienda.

Se recompensará de esa forma a las mil primeras personas que ofrezcan información que permita establecer si las viviendas sociales las ocupan sus legítimos propietarios o se han subarrendado.

El anuncio lo hizo el secretario de Estado para la Vivienda, John Healey, quien ha explicado que el problema de la ocupación ilegal de ese tipo de viviendas es especialmente grave en los centros urbanos.

Se calcula que 50.000 propiedades están actualmente ocupadas por personas a las que no les corresponden.

"La información del público es esencial para atacar este problema, así que ofrezco 500 libras a cualquier persona que con sus informaciones nos ayude a recuperar alguna de las mil primeras viviendas", dice Healey.

Las autoridades insisten en que el proyecto, que costará 4 millones de libras (4.4 millones de euros), ayudará a combatir otros problemas como la prostitución, el narcotráfico, la inmigración ilegal y el gamberrismo.

Sus críticos, como Dylan Sharpe, del grupo Big Brother Watch, señalan que es un nuevo ejemplo de los intentos del Gobierno laborista de convertir a los ciudadanos en delatores de sus vecinos.