La epidemióloga Ángela Domínguez ha asegurado a Efe que España, gracias a los planes y protocolos activados con motivo de la gripe aviar, está "mejor preparada" para hacer frente a una eventual propagación de la gripe porcina, de la que ya se han detectado ocho posibles casos.

Domínguez, que es catedrática de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Barcelona (UB) y miembro de la Sociedad Española de Epidemiología, ha querido transmitir un mensaje de "tranquilidad", a la espera de que se confirme si estas sospechas corresponden realmente a afectados por el virus de la gripe porcina.

Por el momento, señala, "no hay que hacer absolutamente nada", ya que las medidas de prevención sólo son útiles en los países en los que se ha determinado la presencia de la enfermedad, como México o EE UU. En tal caso, añade la doctora, es conveniente que las personas utilicen mascarillas, usen pañuelos de un sólo uso y se laven las manos si han estado en contacto con la nariz, ya que la enfermedad se transmite vía respiratoria.

Los síntomas de la gripe porcina en humanos son muy similares a los de una gripe convencional, lo que puede conllevar a un cierto alarmismo entre la población, ya que, además, la enfermedad puede extenderse con facilidad.

"Cualquier virus de la gripe que sufra cambios y que dé origen a un nuevo subtipo que se pueda transmitir fácilmente tiene posibilidades de ocasionar una pandemia, pero habrá que ver cómo evoluciona en los próximos días", subraya Domínguez.

En cualquier caso, la epidemióloga no cree que deba alertarse a la población, ya que los medicamentos antivirales para la gripe común son eficaces contra la porcina. Eso sí, "se deben administrar lo antes posible".

Ángela Domínguez asegura que España, tras la experiencia que tuvo hace unos años con la gripe aviar, que obligó a activar protocolos y planes de actuación ante la posibilidad de que se tratara de un virus con potencial pandémico, está ahora "mejor preparada" para hacer frente a una eventual propagación de la gripe porcina.

Por ahora, ha dicho, lo que hay que hacer es confiar en los responsables que están realizando el seguimiento de los procesos y que están poniendo todos los esfuerzos para saber si los casos detectados corresponden a infecciones de gripe porcina y, en tal caso, contener la transmisión.