Borja y Carlos vagan por el centro de Madrid. Son las 13.00 horas de un lunes. Deberían estar en el Instituto Leonardo da Vinci (Aluche). "Pero nos hemos aburrido y nos hemos ido de las dos últimas clases", dice Carlos. El 72% de los que se van del instituto lo hacen porque "prefieren hacer otras cosas" y el 56%, porque "no les interesan las clases", según el informe El absentismo escolar en la Comunidad de Madrid, del Defensor del Menor.

Ahora están frente al instituto Salesianos de Atocha: "Hemos venido a recoger a un colega". Hoy no harán nada especial. Se sentarán en un banco, se harán algún porro y esperarán a que llegue la hora de comer para volver a casa. "Mis padres creen que estoy en clase... pero como al final de curso apruebo todas las asignaturas no les importa dónde vaya", comenta Borja con indiferencia.

La semana pasada también hicieron pellas. Esa escapada fue más entretenida. "Nos juntamos varios amigos de otros institutos en casa de uno para jugar a la Play Station y fumarnos unos petas... para qué negarlo. Lo planeamos el día anterior: vemos qué casa va a estar sin padres y quedamos allí", cuentan.

"Desde 1º de ESO"

Los padres de ese chico "no se enteraron" de que un grupo de adolescentes había invadido su piso. "Alguna vez nos han pillado. Se pasa mal, espero que nunca pase eso en mi casa", dice Carlos entre risas. Pero su destino preferido son los parques: "En cualquier parque junto a un instituto público hay gente haciendo pellas, sobre todo en el sur. Lo hacemos desde 1º de ESO". La Policía les controla, "pero cuando nos mandan a clase volvermos a saltar la valla, es muy fácil".

Holgazanear por las calles e invadir las casas de amigos son costumbres habituales entre los estudiantes que hacen pellas. Estos hábitos sólo son superados por otro: el 42% se queda en casa durmiendo. "¿Los recreativos? Eso ya pasó de moda". Las nuevas tecnologías y las drogas han ganado a los billares.

El absentista tipo es un varón de 15 años, y el 19,5% pertenece a alguna banda. La mayoría (47%) son gitanos, el 34% son españoles no gitanos y el 19%, inmigrantes.