Entre los que se quedarán en casa, el motivo principal son los apuros económicos. El 60% de los que pasarán todo el verano en la ciudad se quedarán aquí por falta de dinero, mientras que el año pasado sólo el 39,8% tuvieron en cuenta los ahorros.

Además, pese a que más personas han decidido salir, se decantarán por destinos más baratos: sólo el 8,8% viajarán a otro país, frente al 9,9% que se fue al extranjero en 2007. El destino preferido de los madrileños es el resto de España, ya que el 52,1% viajará a otra comunidad (en 2007 escogieron este destino el 48,6%).

Los madrileños pensarán en el bolsillo, principalmente, a la hora de escoger el tipo de alojamiento (el 23,8% reducirá gastos en este punto). A continuación prefieren ahorrar con las comidas y el ocio (16,7%) y acortando la duración de las vacaciones (14,6%).

Los del norte viajan más

El hotel continúa siendo el alojamiento favorito (el 37,4% lo elige), seguido por el apartamento (21,8%) y la segunda vivienda (20,3%). En general, los trabajadores irán a hoteles y los jubilados, a su segunda casa en el destino de veraneo.

El típico madrileño veraneante, según el perfil trazado por la encuesta, es un hombre menor de 65 años, con estudios superiores y residente en el centro o el norte de la ciudad.