Todos los estudiantes que entregaron su paquete de tabaco a la Unidad de Tabaquismo de la Universidad de Huelva en el Día Mundial sin Tabaco recibieron un cinturón como regalo. Los miembros de esta unidad realizaron además una campaña informativa por todo el campus de El Carmen entre los universitarios y midieron con un cosímetro su nivel de monóxido de carbono.

La mayoría de los jóvenes sometidos a esta medición registraron niveles bastante altos, entre el 15 y el 17, teniendo en cuenta que el índice de los fumadores suele ser superior a cinco y que a lo largo del día suele ir aumentando, por lo que quedó demostrado que la adicción al tabaco está extendida en el ámbito universitario.

Para combatirla, la coordinadora del Plan Integral de Tabaquismo del distrito Huelva-Costa, Maite González, aseguró que que "la Universidad de Huelva quiere firmar un convenio con la Consejería de Salud por el que se ofrecerá de forma gratuita el tratamiento para dejar de fumar tanto a alumnos como y a los docentes, así como al personal de servicio de la Universidad de Huelva".

Además comentó que durante la época de exámenes, el consumo de cigarros aumenta y los que menos fuman son los que hacen más deporte. También añadió que los últimos estudios de Salud fijan la edad de empezar a fumar en los 12 o 13 años, por lo que "es básica la información y la prevención con los más jóvenes fomentando otro tipo de hábitos más saludables ya que con ellos no resulta la información de las consecuencias porque las ven muy lejos".

Esta campaña de prevención se organizó por primera vez el año pasado y con ella que recogieron muchos cigarros y varios los fumadores los que se animaron a abandonar este perjudicial vicio. Concretamente de las 250 personas que participaron, sólo 10 de comprometieron a dejarlo, pero ninguna inició el tratamiento.

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