Sólo queda un mes para la inauguración de la Expo y unos 5.000 obreros (3.000 de Expoagua y 2.000 de los países participantes) siguen trabajando a contrarreloj en Ranillas para que todas las obras estén listas a tiempo.

La actividad es frenética, según los propios trabajadores, y en proyectos como el Pabellón Puente o las plazas temáticas se trabaja ininterrumpidamente las 24 horas del día. En el resto de edificios, los trabajos se hacen entre las 7.30 y las 21 horas.

En el Pabellón Puente, la obra más crítica de la Expo, ya se han montado casi todas las piezas de la fachada y se está compaginando el final de la construcción con el montaje de la exposición interior Agua, recurso único.

Las obras están ejecutadas al 97%. En estos momentos, los trabajos se centran en el acondicionamiento interior de los pabellones, el montaje de los contenidos y la urbanización de las calles del recinto.

El edificio más avanzado es el Acuario Fluvial y, según Expoagua, en los próximos días se inaugurarán la Central de Energía y el Pabellón del Agua Digital.

Tres millones de entradas

Según los datos que maneja Expoagua, la muestra recibirá entre 6,5 y 7 millones de visitas, la mayoría de ellas de gente del país. A falta de un mes para la inauguración, se han vendido ya más de tres millones de entradas.

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