El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha pedido afrontar con paz, civismo y dignidad la República catalana: "Vienen horas en que a todos nos corresponderá mantener el pulso de este país" con estos valores.

Lo ha dicho al dirigirse a los diputados y alcaldes que han llenado la escalinata del Parlament tras aprobarse la República e instarse al Govern a que la implemente, y ha ensalzado "la grandeza de este momento".

Puigdemont ha defendido la razón y la legitimidad del Parlament elegido en las urnas y ha celebrado el paso que acaba de dar, "largamente esperado y luchado".

"Hoy el Parlament de nuestro país, un parlamento legítimo, surgido de las elecciones del 27S, ha dado un paso largamente esperado y largamente luchado. La inmensa mayoría de representantes políticos legítimamente elegidos han culminado un mandato validado en las urnas", ha afirmado el presidente catalán.

En tono solemne, Puigdemont ha indicado que su discurso le salía del "corazón, de la emoción, de la razón y de la legitimidad", para contribuir a la "grandeza" del momento.

"Ciudadanos de Cataluña: vienen horas en las que a todos nos tocará mantener el pulso de este país, nuestro país. De mantenerlo sobre todo en el terreno de la paz, el civismo y la dignidad", ha exclamado.

En su intervención, Puigdemont se ha mostrado convencido de que, "como ha pasado siempre y como continuará pasando, sin ningún tipo de duda", son las instituciones y las personas los que "conjuntamente, de manera inseparable, construyen pueblo y sociedad".

"Un pueblo no se puede construir separando estos dos elementos. Y hoy, los alcaldes y diputados, representáis de manera muy ejemplar la unión, la coordinación, la complicidad y la solidaridad entre instituciones y entre ciudadanía para hacer efectivamente construcción de pueblo y de país", ha asegurado.

Puigdemont ha destacado que está "en manos" de los catalanes continuar "fortaleciendo" las bases que hacen de Cataluña "una vieja nación de Europa", con una lengua, una cultura y un derecho propios que duran siglos, por lo que cree que sólo con ello ya basta para entender los "derechos históricos" que legitiman "haber llegado hasta aquí".

"Somos una sociedad que siempre ha respondido pacíficamente y cívicamente a sus grandes retos democráticos. Por este motivo, estos grandes retos se han asumido de manera pacífica y cívica y se han transformado en conquistas democráticas", ha resaltado.

El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha apelado, por su parte, a la "participación de todos" en el proceso constituyente para construir la república catalana aprobado en el Parlament, y ha asegurado que el Govern estará al servicio de todos los ciudadanos.

En un discurso junto al presidente ante los diputados y alcaldes que han llenado la escalinata del Parlament tras el pleno, Junqueras ha defendido que han actuado en base a los valores universales: "En todo el mundo pueden compartir los valores que queremos expresar en esta nueva república".

Ha subrayado su compromiso de "ser un solo pueblo, inclusivo e integrador", garantizando la igualdad de derechos, y se ha dirigido a los pueblos del mundo y especialmente a los pueblos de España para construir un futuro en común mucho mejor.

Junqueras ha afirmado que a los independentistas los representan "valores de carácter universal", como son los de la igualdad, la libertad o la fraternidad, que comparten muchas personas en diversas partes del mundo, ha explicado.

El vicepresidente de la Generalitat se ha dirigido también a los ciudadanos y a las "tierras españolas", con quienes ha dicho, "compartimos tantas cosas en común", como lengua o cultura, para reiterarles el compromiso "por construir un futuro en común mucho mejor" con las herramientas propias de un estado y de "cualquier república".

Junqueras ha destacado que los mandatos del 25 de septiembre de 2015 y del 1 de octubre de 2017 serán "la guía en la construcción de esta nueva república y proceso constituyente".