Un hombre que perseguía a un violador con un cuchillo fue abatido por un policía el pasado sábado por la noche en la localidad argentina de Zárate, cerca de la frontera con Uruguay.

Gustavo Barrientos, de 37 años, estaba en su casa en "muy mal estado de ánimo porque habían violado a una de sus hijas recientemente", según fuentes cercanas al caso que afirman que había empezado a beber.

Repentinamente, el hombre salió corriendo de su casa asegurando que iba a detener al violador y su familia llamó al número de emergencias porque temía que pudiera agredir al presunto violador, publica Infobae.

Cuando los efectivos policiales llegaron a la zona a la que se había dirigido Barrientos, José Luis Careta, un policía de 27 años, preguntó a un grupo de personas si le habían visto y le contestaron que había pasado corriendo "con un cuchillo en la mano".

Disparó tres veces

Careta encontró a Gustavo Barrientos corriendo por una calle cercana y sacó su arma. Efectuó dos disparos que no hirieron a Barrientos y un tercero que le provocó la muerte "de forma instantánea" tras impactar en su cabeza.

Según los testigos, el policía "no dio la voz de alto y disparó directamente" hacia la víctima "cuando estaba de espaldas y sin ningún cuchillo". José Luis Careta fue detenido cuando la familia del fallecido pretendía lincharle.