Los primeros ensayos con público de la obra de teatro Harry Potter and the Cursed Child -en español, Harry Potter y el niño maldito-, basada en una historia inédita de la escritora J.K. Rowling, comienzan este martes en el West End de Londres rodeados de secretismo.

Cerca de 1.500 personas asistirán esta noche en el Teatro Palace a la primera representación de una obra que no se estrenará de forma oficial hasta el 30 de julio y cuyas entradas están agotadas hasta mayo de 2017.

Para tratar de evitar filtraciones sobre el argumento de la obra, que retoma la trama de las siete novelas de Harry Potter publicadas hasta ahora, Rowling divulgó a través de Twitter un vídeo en el que pide a los fans que asistirán a los ensayos que eviten revelar detalles de la función.

"Simplemente, queremos que todos los que han comprado una entrada para #CursedChild disfruten de las sorpresas en escena #GuardaLosSecretos", escribe la autora.

"Durante años, habéis sido fantásticos a la hora de guardar los secretos de Harry Potter, para no estropear los libros a los lectores que vendrían después de vosotros. Así que os pido una vez más que guardéis el secreto", recoge también en su cuenta de Twitter.

El dramaturgo británico Jack Thorne ha adaptado una historia original de Rowling para volver a dar vida al niño mago, protagonista de una serie de libros que han vendido más de 450 millones de copias desde 1997 y han dado lugar a ocho películas.

La obra de teatro del West End presenta a un Harry Potter -interpretado por Jamie Parker- ya adulto y con tres hijos, 19 años después del último libro de la saga, Harry Potter and the Deathly Hallows (Harry Potter y las reliquias de la muerte, 2007).

En octubre, el Teatro Palace de Londres vendió las primeras 175.000 entradas en 24 horas y ha agotado ya todos los asientos, si bien ha anunciado que ha reservado 40 entradas semanales que estarán disponibles en taquilla cada viernes.

En una entrevista publicada este fin de semana por el diario The Observer, Rowling se mostró frustrada por la reacción crítica de "un grupo de racistas" ante la elección de la actriz negra Noma Dumezweni para representar el papel de Hermione.

Ante los mensajes que ha recibido diciendo que Hermoine debería ser "una mujer blanca", la escritora comentó: "¿Qué puedo decir? El mundo es así. Noma fue elegida porque era la mejor actriz para el papel".

"He decidido no mostrarme demasiado preocupada por este tema y simplemente afirmar que Hermione puede ser una mujer negra. Tiene todas mis bendiciones y entusiasmo", afirmó.