El incendio que esta noche ha afectado a un edificio del casco histórico de Pontevedra, junto a la Praza da Ferrería, entre las calles Soportales y Michelena, ha obligado a desalojar a unas "9 o 10 personas", según el jefe de la Policía Local de Pontevedra, Daniel Macenlle.

Otras personas lograron salir "motu proprio de los edificios" en cuanto se descubrió que el humo. "A mayores", según Macenlle, los agentes de la Policía Local han procedido a "cerrar todo el comercio" próximo al fuego, tanto en la calle Michelena como en la plaza de A Ferrería y la calle Soportales.

Por el momento se desconocen las causas del incendio, puesto que la investigación sobre el origen de las llamas comenzará "cuando los bomberos terminen" de realizar su trabajo. "Lo esencial", en un primer momento era "controlar" las llamas y que "no afectase a otros edificios", ha explicado Daniel Macenlle.

El fuego afectó principalmente a un bajo de un inmueble, ocupado por una conocida tienda de telas, La Moda Ideal, fundada en 1896.

Por su parte, la concejala de Protección Ciudadana, Carme da Silva, ha asegurado que la zona presentaba unas "características complejas" para la labor de los bomberos por tratarse de un inmueble "muy largo". Por ello, los efectivos de extinción permanecerán "durante horas" en el lugar "mojando constantemente" la zona afectada.

Carme da Silva ha destacado que no hubo víctimas, pese a tratarse de un incendio "grave", cuyas consecuencias no han ido más allá "que el edificio dañado". Por ello, ha agradecido el trabajo de los Bomberos de Pontevedra, y los efectivos de O Morrazo y O Salnés, junto con la Policía Nacional y Local, que "trabajaron de forma ágil y coordinada", ha añadido.

Tanto la calle Soportales como Michelena se encontraban acordonadas por la Policía Local y la Policía Nacional. Los agentes locales han pedido colaboración ciudadana para evacuar de la zona a una persona con movilidad reducida.

El suceso ha reunido en ambas calles a muchos vecinos y paseantes, que comentaban con preocupación el siniestro y se lamentaban de sus consecuencias en uno de los establecimientos comerciales más emblemáticos de la ciudad.