Un potente anticiclón situado en el centro de Europa no permitirá la llegada de frentes hasta España y dejará cielos poco nubosos o despejados y temperaturas suaves en todas las regiones, salvo en Galicia, "que quedará un poco al margen".

El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ángel Alcázar, ha explicado que estas altas presiones se mantendrán durante toda la semana que viene y sólo en Galicia, Cantábrico occidental y área del Estrecho podrían registrarse algunas precipitaciones, aunque de carácter débil.

Esta situación anticiclónica traerá además consigo unos valores térmicos inusualmente altos, incluidas casi todas las zonas del norte peninsular, con máximas por encima de los 25 grados y mínimas que en general no bajarán de los 10.

Ángel Alcázar ha explicado que "pese a ser llamativo, este ambiente suave se corresponde con la época en que nos encontramos", conocida como "veranillo de San Martín", que no suele alargarse más allá de una semana, aunque en ocasiones ha entrado algo más tarde y se ha mantenido hasta finales de mes.

Con todo, el sábado, las temperaturas rozarán o superarán los 25 grados en la mayoría de las provincias andaluzas, Extremadura y las islas Canarias, aunque también en algunas del norte, como Bilbao y Ourense.

Precisamente, la máxima de la península se registrará en Bilbao, Sevilla y Huelva, con 26 grados, el mismo valor que en Las Palmas de Gran Canaria, mientras que los valores mínimos se quedarán en 6 grados en Ávila, Palencia y Teruel.

"El flujo de viento del sur hace que las temperaturas sean altas y que el Cantábrico tenga valores especialmente llamativos", ha explicado el portavoz de la Aemet, quien ha matizado que las variaciones entre el día y la noche serán importantes, aunque se descartan las heladas.

El domingo predominará el tiempo estable en todas las zonas, aunque el cielo se cubrirá al final del día en el extremo noroeste peninsular, donde podría producirse alguna precipitación de carácter débil.

El lunes se mantendrá la situación de estabilidad, con la única excepción de Galicia, Cantábrico occidental y el área del Estrecho, donde, según el portavoz de la Aemet, el fuerte viento favorecerá las precipitaciones, y el ambiente será muy agradable en Madrid capital, que vivirá una jornada festiva por la patrona de la ciudad.

Según Ángel Alcázar, esta situación de tiempo estable "no durará mucho más de una semana y cuando se retire el anticiclón las borrascas tendrán más fácil la llegada", aunque "tampoco tiene por qué llegar el frío".

En todo caso, a partir del jueves próximo los vientos de levante favorecerán "alguna precipitación sin importancia" en zonas del sureste peninsular, litoral levantino y Baleares, y el enfriamiento nocturno provocará la formación de brumas a primeras horas, sobre todo en los valles de los grandes ríos.

Según el portavoz de la Aemet, "el otoño es siempre muy variable, y se pasa de situaciones de estabilidad a inestabilidad con mucha facilidad".