La auxiliar de enfermeria Teresa Romero, el primer caso de contagio del virus del ébola fuera de África, ha reaparecido este jueves, un año después de recibir en alta médica e inmersa aún en un proceso de rehabilitación.
Romero ha participado junto a su marido, Javier Limón, a la concentración convocada en Madrid por el partido animalista Pacma coincidiendo con el primer aniversario de la muerte de Excálibur, el perro que la pareja tenía como mascota.
Nada más confirmarse que Teresa se había contagiado, el departamento de Salud Pública decidió sacrificar a la mascota por temor a que pudiera haberse contagiado también y ser portador del ébola.
Teresa ha acudido a la concentración de Madrid, que arrancó de la plaza de Callao a las 17.00 horas, pero las manifestaciones fueron secundadas por ciudadanos de hasta otras 17 ciudades, entre ellas Barcelona, Córdoba, Las Palmas o León.
El objetivo de Pacma es exigir del Gobierno la retirada del plan de contingencia que contempla el sacrificio automático de las mascotas ante un posible caso de contagio por el virus del ébola.
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