Para remachar con rigor la idea de que los postulados de la Bauhaus, la escuela de diseño más influyente del siglo XX, siguen estando vigentes, la exposición convierte en hashtag el lema central del efímero centro educativo (1919-1933): #itsalldesign. El enunciado todo es diseño era la argamasa que daba forma al heterodoxo planteamiento de la escuela alemana, que no deseaba formar a diseñadores o arquitectos, sino a artesanos humanistas capaces de afrontar no ya el planteamiento de un proyecto, sino su efecto sobre la vida.

Das Bauhaus #allesistdesign es el título, en alemán, de la mayor muestra antológica montada nunca sobre el hogar del primer experimento de "arte total" de la historia, dicen los organizadores, el Museo de Diseño Vitra de la localidad del suroeste alemán de Weil am Rhein, uno de los centros europeos con mejor gusto de los pocos que se dedican temáticamente al diseño.

La exposición, que estará en cartel desde el 26 de septiembre al 28 de febrero de 2016, presenta centenares de proyectos e ideas nacidos y desarrollados en las dos sedes que tuvo la Bauhaus, la primera en Dessau y la segunda en Berlín, antes de que Hitler ordenara el cierre de la escuela por proponer un "cosmopolitismo judío" y "bolchevique".

Los organizadores desean "revelar la sorprendente actualidad" de la "legendaria institución cultural" de cuya fundación se cumplirá un siglo en 2019. Habrá ejemplos de mobiliario, objetos decorativos, arquitectura, pintura y dibujo, fotografía, cine y todo el abanico de disciplinas creativas que en la Bauhaus formaban un cuerpo único, dado que la escuela estaba basada en la idea central de que "la forma sigue a la función" y en el ideario casi utópico de que el arte no existe como profesión y resultaba necesario "regresar a la artesanía", a la simpleza elegante y funcional de edificios, sillas, tipografías, lámparas y vajillas.

El Vitra mostrará obras de los muchos docentes que impartieron clases en la Bauhaus, entre otros, los arquitectos Walter Gropius —fundador de la escuela— y Mies van der Rohe; los pintores Lyonel Feininger, Paul Klee y Vassily Kandisky; el escultor Gerhard Marcks; el director de escena Oskar Schlemmer; el fotógrafo László Moholy-Nagy; el diseñador de muebles Marcel Breuer..., y así hasta varios centenares cuyas obras y biografías pueden ser consultadas en este índice onomástico en línea.

Para demostrar la vigencia del tipo de formación integral y humanista de la Bauhaus, también se incluyen trabajos, ensayos escritos y proyectos gráficos y de diseño, de creadores actuales como Olaf Nicolai, Adrian Sauer, Enzo Mari, Norman Foster, OpenDesk, Konstantin Grcic, Hella Jongerius, Alberto Meda y Jerszy Seymour.

En la misma línea de yuxtaponer obras inspiradoras e inspiradas —la Bauhaus está en la fuente de algunos modelos de Mercedes-Benz—, habrá diseños de homenaje a la Bahuaus de, entre otros, Mike Meiré. Algunas de las obras actuales han sido encargadas exclusivamente para Das Bauhaus #allesistdesign, que también anuncia la edición de un catálogo de 400 páginas con centenares de ilustraciones y fotos, ensayos interpretativos e históricos y un un glosario de la terminología del diseño de la Bauhaus.

Los organizadores encuentran la huella de la escuela en tendencias actuales como el social design, el open design o el design thinking, que vuelven a reclamar que los diseñadores tengan una mayor implicación personal e incluso emocional con sus obras y que nunca olviden que su trabajo es, en última instancia, "diseñar la sociedad".

En este sentido, la Bauhaus es contemplada en la exposición como un "complejo laboratorio de la modernidad" con raíz humanista —las ideas-base del centro era "la recuperación de los métodos artesanales en la actividad constructiva, elevar la potencia artesana al mismo nivel que las Bellas Artes e intentar comercializar los productos que, integrados en la producción industrial, se convertirían en objetos de consumo asequibles para el gran público"—.

La muestra está divide en cuatro espacios temáticos: comienza con un resumen del contexto histórico y social, sigue con la presentación de iconos del diseño de la Bauhaus y objetos menos conocidos, luego se ocupa del tema del espacio y muestra cuántos diseñadores diferentes tomaron parte en la formulación del concepto —desde escenógrafos, arquitectos que buscaban la esencia de la vivienda mínima y artistas que reflexionaron sobre el uso de color— y, por último, analiza la política de comunicación, con ejemplos de tipografía, cine experimental y fotografía.

Das Bauhaus #allesistdesign quiere también derribar algunos lugares comunes y "acabar con el tópico de que el diseño de la Bauhaus era en primer lugar minimalista, frío y geométrico" mostrando el interés de la escuela por "las relaciones sociales, los experimentos y los procesos". La conclusión de los organizadores es que "muchos de los debates actuales se parecen de una manera sorprendente a los de la Bauhaus" en lo que se refiere a las posibilidades de producción de nuevos materiales, el papel de los diseñadores en la sociedad o las ventajas de la colaboración interdisciplinaria.