El hospital Clínico de Zaragoza, referencia para las revisiones de la alergia en la capital aragonesa y buena parte de Aragón, recupera esta temporada las consultas vespertinas, coincidiendo con año electoral y tras haberlas retirado en 2013.

Aunque la dirección del hospital acabó poniendo refuerzos también el año pasado (eso sí, a medias, más tarde de lo habitual y después de que 20minutos publicara la falta de medios en consulta) esta será la primera vez en tres ejercicios en que el servicio funcionará reforzado al cien por cien y hasta final del verano.

Tanto que los propios responsables estiman que se podrá absorber casi la totalidad de la lista de espera, que ha llegado a arrastrar demoras de casi medio año y que ahora ronda los tres meses.

La puesta en marcha de las consultas vespertinas (que ya funcionan de 14.30 a 22.00 horas complementando a las matinales) coincide además con un incremento brusco de los niveles de polen en la atmósfera. "La bonanza en el tiempo que estamos viviendo estos días hará madurar las plantas y aumentará el nivel del polen, sobre todo de las gramíneas y más adelante del olivo", explica el doctor Carlos Colás, del servicio de alergología del Clínico.

La consecuencia la notarán de manera inmediata e intensa los más de 50.000 alérgicos al polen que hay en Aragón. El 80% de ellos sufren síntomas directos de las gramíneas; estornudos, picor de nariz y ojos y congestión nasal son los más habituales. Solo las consultas del Clínico reciben en torno a un millar de pacientes extra durante la temporada de alergias (entre 8 y 10 diarios de media).