Nace la tendencia a vivir en cápsulas en tiempos de crisis

  • Ya hay barceloneses que habitan en hostales con estos compartimentos típicos del Japón, que han aterrizado en la ciudad.
  • Son más económicos que una habitación de alquiler y proporcionan privacidad.
  • Ofrecen precios especiales para los que se quedan durante periodos largos.
Sergi, en la cápsula en la que duerme habitualmente en Barcelona.
Sergi, en la cápsula en la que duerme habitualmente en Barcelona.
MIQUEL TAVERNA
Sergi, en la cápsula en la que duerme habitualmente en Barcelona.

Los hostales cápsula, que se acostumbran a ver por televisión como una rareza del Japón, han aterrizado en Barcelona, y no sólo ganan adeptos entre los turistas, sino que ya hay gente que los elige para vivir. Y es que, en tiempo de crisis económica, sus precios moderados y la privacidad que proporcionan en relación a otros alojamientos hoteleros baratos, se han convertido en un gancho.

"Sale más a cuenta habitar en estos establecimientos que alquilar una habitación, sobre todo en temporada baja, cuando el precio de una noche está alrededor de 12 euros" -26 en el alta-, apunta Javier Velat, que dirige Hostel Box, la empresa que ha abierto los tres primeros hostales cápsula de la ciudad, con casi 200 plazas, y añade que ofrecen un precio especial de "60 euros a la semana" para los que hacen estancias largas.

Esta cantidad se traduce en 240 euros al mes, mientras que alquilar una habitación en Barcelona cuesta 350 de media, según el portal fotocasa, y un piso de 60 metros cuadrados, unos 648, según la immobiliaria Tecnocasa.

Velat explica que el perfil de las personas que escogen estas cápsulas como vivienda habitual es variado. "Ahora mismo, por ejemplo, tenemos barceloneses e italianos que trabajan y también estudiantes de otros países, como un brasileño o un húngaro, que llevan aquí cuatro o cinco meses. Cuando empieza el curso universitario tenemos alrededor de un 20% de jóvenes que vienen a hacer Erasmus y se alojan aquí mientras buscan piso. Algunos al final se quedan todo el año ", afirma. "Se acaban convirtiendo en parte de la familia", añade.

Entre los que hacen reservas en estos hostales por estancias cortas, según Velat, aumentan las familias, "que pueden coger una habitación entera" –hay de cuatro a 14 cápsulas en cada una- y "las personas que venden en Barcelona por cuestiones de negocios". "Por ejemplo, tenemos un comercial de Valencia de una empresa de automoción que va con vestido y corbata y pasa una semana al mes aquí", apunta.

La principal ventaja de estas cápsulas –de 2,5 metros de largo por 90 centímetros de ancho y 1,40 metros de altura– es, explica el director de los hostales, que "tienes tu habitación dentro de una habitación y si quieres socializarte te socializas y si no, no". "La mayoría, sin embargo, busca conocer gente, muchos, porque viajan sólo, y para ayudarlos nosotros organizamos actividades como barbacoas o rutas en bici o a pie", señala.

Velat, que ahora tiene 32 años, abrió el primer hostal de estas características en Barcelona en 2012, cuando tenía 29, inspirándose en las cápsulas japonesas. "Las nuestras no son exactamente iguales porque en vez de tener una entrada tubular se accede por los laterales y tienen una cortina", puntualiza.

También asegura que está "estudiando" extender el negocio a Madrid y otras ciudades europeas. "En el resto de Europa hay hostales como estos en Amsterdam y en pocos lugares más y tengo ganas de intentarlo", explica.

"Llegué aquí por problemas familiares y económicos"

Ya hace dos meses que Sergi, un barcelonés de 22 años, vive en el hostal cápsula de Hostel Box a la calle Mare de Déu del Coll. Explica que llegó porque estaba en el paro y tenía "problemas familiares y económicos" y que en principio su idea era irse cuando encontrara una habitación pero al final decidió quedarse porque "sale más a cuenta". "Ahora he encontrado trabajo como dependiente pero he decidido seguir aquí", apunta.

"El ambiente es genial, conoces gente otros países y el personal es ya como mi familia", afirma, y añade que ha hecho amistad con unos italianos que también viven allí y su idea es buscar piso con ellos con el tiempo.

También explica que "no hay color entre una litera y una cápsula" porque esta última "te da mucha más intimidad y tienes tu propia mesilla de noche, tu lamparita y tu enchufe para conectar el móvil". Informa, además, de que tiene el desayuno incluido y hay una cocina a disposición de los clientes.

Jefa de sección Barcelona '20minutos'

Licenciada en Periodismo por la Facultad de Ciències de la Comunicació Blanquerna-Universitat Ramon Llull y máster en Periodismo por la Universitat de Barcelona con la Columbia University de Nueva York. Me dedico al periodismo desde 2003 y formo parte desde 2014 del equipo de 20minutos, en el que primero fui redactora, sobre todo de información municipal, y ahora soy jefa de la sección del diario en Barcelona. Anteriormente, trabajé en medios como el diario Qué!, el diario La Nación de Costa Rica, Europa Press o ETV-Llobregat TV, entre otros.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento