Usos ilegítimos de tarjetas de créditos robadas, páginas web que hacen ventas fraudulentas, engaños mediante la usurpación de identidades a través del correo electrónico... El creciente uso de las nuevas tecnologías se está convirtiendo cada vez más en el gancho que usan muchos delincuentes para tratar de sacar dinero de manera ilegal.  También en la provincia de Zaragoza, donde cientos de personas denuncian cada año haber sido víctimas de algún delito relacionado con Internet.

El número de estafas informáticas se ha triplicado en un solo año. Ha pasado de las 240 que registró la Fiscalía en 2012 a las 787 del año pasado (un 227% más), según los  la memoria de 2013. El propio Fiscal Superior de Aragón, José María Rivera, destacó el lunes en las Cortes el notable incremento que han registrado los delitos informáticos.

El grupo especial de la Policía Nacional reconoce el aumento, relacionado también con la mayor dedicación y vigilancia de las fuerzas de seguridad. Y lo clasifica: destacan sobre todo los relacionados con los usos ilegales de tarjetas de créditos ajenas para hacer compras en Internet, las estafas con portales de compraventa que exigen pagos por adelantado de productos inexistentes o defectuosos y el robo de contraseñas y claves bancarias.

"Llevamos viendo una clara tendencia al alza de este tipo de situaciones; siempre aconsejamos denunciar", explica Lucía Germani, de la asociación de usuarios y consumidores Torre Ramona. "Desde usuarios que reciben facturas de líneas no contratadas a alquileres fantasma por Internet que requieren pagos previos como engaño", matiza Lucía.