La muerte de un niño de 6 años alérgico, el pasado 7 de mayo, en una granja escuela de Villanueva de Perales (Madrid) se debió a la ingesta de un yogur que no toleró, según el resultado final de la autopsia.

Fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil han explicado que este es el resultado final de la autopsia, que ya ha sido remitido al juzgado que instruye el caso junto con los testimonios de los monitores de la granja escuela y de los profesores del colegio que acompañaban a ese grupo de menores.

Los investigadores tienen claro que no hubo intencionalidad al ofrecer al niño un yogur de soja, creyendo que no contenía proteína de la leche y que por tanto no le provocaría una alergia.

Pero la investigación judicial continúa y están por determinar las responsabilidades que puedan derivarse, según las mismas fuentes.

La Guardia Civil ya apuntó tras el suceso que el fallecimiento del menor fue accidental y que los protocolos establecidos para los niños alérgicos se siguieron, ya que se avisó a la familia del menor cuando se encontró enfermo, se le administró la medicación correspondiente cuando empeoró y se le trasladó a un centro médico.

El suceso ocurrió el pasado 7 de mayo en la granja escuela El Acebo de Villanueva de Perales, cuando un escolar del colegio La Salle Nuestra Señora de Las Maravillas de Madrid, que llevaba desde el lunes en el recinto y tenía asma, sufrió una reacción alérgica extrema o shock anafiláctico.

Los monitores de la granja llamaron a la madre, que les explicó la medicación que necesitaba, pero el niño empeoró y decidieron llevarle en un coche al hospital.

En el camino entró en parada cardiorrespiratoria, por lo que los monitores llamaron a los servicios de emergencia, que le trasladaron al hospital Rey Juan Carlos, donde falleció al poco de ingresar.