La compra del City National Bank de Miami por parte de Caja Madrid —operación que terminaría llevando a prisión preventiva al presidente de la entidad en ese momento, Miguel Blesa— fue apoyada por todos los miembros del consejo de la entidad, incluidos los que representaban a IU y PSOE, José Antonio Moral Santín y Antonio Romero, según publica este lunes eldiario.es.

Este medio digital ha tenido acceso al acta de la reunión del consejo de Caja Madrid del 14 de abril de 2008 en donde se discutió dicha operación, gracias a los correos electrónicos de Miguel Blesa que les han sido filtrados. El CNBF provocó en su momento unas provisiones de más de 500 millones de euros, si bien el banco se ha vendido el pasado mes de mayo, y ha permitido aflorar unas plusvalías de 180 millones.

En ese documento se puede leer las objeciones que pusieron a la compra por parte de los consejeros Estanislao Rodríguez-Ponga, exsecretario de Estado de Hacienda con Aznar y seleccionado para el puesto en el consejo por Esperanza Aguirre, y Fernando Baquero, representante de CC OO, que recomendaron una opinión externa para valorar el operación.

Dichas opiniones levemente contrarias, y otras, a la compra fueron completadas por las de Moral Santín y Romero. Moral, calificado por Blesa en sus correos como "aliado", argumentó que la operación era "estratégica", si bien reclamó trambién un informe externo para valorar si el precio que se pagaba por el CNBF era el correcto.  Moral Santín aseguró, según el acta en poder de eldiario.es, que "los bancos son bienes singulares que requieren de una metodología de precios también singular"

Romero, al que los emails de Blesa califican de "aliado fiel" y "confidente", por su parte, se declaró "radicalmente en contra" de pedir una opinión externa. A pesar de esta objección, finalmente el banco alemán Deutsche Bank fue designado por Caja Madrid como entidad independiente para valorar el precio del banco de Miami.

La compra del City National Bank terminó llevando, en mayo de 2013, a Miguel Blesa a prisión, por orden del juez Elpidio José Silva, quien calificó en su momento la gestión en la caja como "aberrante". Actualmente, las tornas se han vuelto: Blesa está en libertad y es el juez Silva quien está sometido a juicio por una presunta prevaricación en la instrucción de este caso.