Un tribunal de Bucarest condenó este martes a seis años y ocho meses de cárcel a los dos cabecillas del robo de siete valiosos cuadros del museo Kunsthal de Rotterdam en octubre de 2012, cuyo paradero aún se desconoce.

Los dos condenados, Radu Dogaru y Eugen Darie, lideraron el robo de las obras de arte, cuyo valor conjunto se estima en entre 50 y 100 millones de euros.

Dogaru fue sentenciado a otros tres años y seis meses por constituir un grupo criminal y a cuatro años por tenencia ilícita de armas, aunque el considerado jefe del robo sólo cumplirá el castigo más grave, de seis años y ocho meses. Un tercer acusado, Adrian Procop, será juzgado en ausencia ya que se encuentra fugado.

La madre de Dogaru está acusada de haber traslado los cuadros. En un primer momento, llegó a declarar que había quemado los lienzos para proteger a su hijo después de que fuera detenido, aunque luego se retractó.

Radu Dogaru aseguró luego que los cuadros están en posesión de un amigo suyo del que aseguró desconocer su ubicación. El espectacular robo se perpetró en apenas tres minutos en la madrugada del 16 de octubre del año pasado, después de haber forzado una puerta del museo.

Los ladrones se hicieron con Cabeza de Arlequín, de Picasso; La Lectora en Blanco y Negro, de Matisse; y El Puente Waterloo de Londres, de Monet. Además, se llevaron El Puente Charing Cross de Londres, también de Monet; Mujer delante de una ventana abierta, llamada la novia, de Paul Gauguin; Autorretrato, de Meyer de Haan, y Mujer con los Ojos Cerrados, de Lucian Freud.