El tercer encierro de los San Fermines 2013 ha resultado bastante rápido pero también tenso y peligroso debido a la carrera en solitario de uno de los astados desde el comienzo del recorrido que, embravecido, ha provocado más de un susto en algunos de los participantes.

Ningún corredor ha resultado herido por asta de toro aunque dos hombres han acabado con traumatismos y han sido trasladados a centros hospitalarios, según ha informado la administración sanitaria navarra.

Uno de ellos es un joven que tiene un traumatismo abdominal y el segundo un hombre de mediana edad, que ha sido trasladado al Hospital Virgen del Camino con un traumatismo dorsal.

Estos son hasta ahora los heridos confirmados en este tercer encierro, que ha resultado rápido y muy peligroso, y que han protagonizado los toros de Valdefresno, de Tabera de Abajo (Salamanca), debutantes en los sanfermines.

Pronto uno de los toros se separó del grupo y salió disparado liderando en solitario la carrera. Sus astas se movían de un lado a otro a medida que la gente se iba poniendo a su lado provocando algunas caídas aunque afortunadamente no ha habido que lamentar ningún incidente de gravedad.

Un segundo grupo de dos astados venía por detrás dejando numerosas caídas también y momentos de mucha tensión. El resto de la manada ha acabado la carrera de forma limpia y sin incidentes graves.

Una vez finalizado el encierro y con los toros ya en la plaza, un cabestro se ha dirigido hacia la puerta de entrada donde se ha desplomado en el suelo provocando una gran concentración de personas a su alrededor.

El manso, que poco antes había chocado contra un toro, finalmente ha muerto.