Este martes se ha producido un nuevo desprendimiento de piedras en la carretera N-121-A, Pamplona-Behobia, a la altura de Bera en el mismo punto (kilómetro 63,200) que el ocurrido la pasada semana. El material, procedente del talud rocoso de la antigua cantera Arkaitza, ha obligado a cortar un carril y a establecer el paso alternativo de los vehículos.

La empresa titular de la parcela en la que ha ocurrido el desprendimientos, 'Hormigones y Morteros Preparados, S.A.', ha sido requerida por el Departamento de Fomento para que efectúe los trabajos de estabilización del talud, para los que ha contratado un equipo de especialistas en trabajos de altura (INACCES) que van a proceder a revisar el talud y eliminar los bloques de piedra que han quedado en situación inestable.

Para ello, ha sido preciso establecer una zona de seguridad en la carretera mediante el corte de carril y el correspondiente paso alternativo de vehículos mientras duren los trabajos de saneo y estabilización, sin que se pueda precisar la duración de los mismos, ha informado el Gobierno de Navarra en un comunicado.

El tráfico está siendo regulado con señalistas en horario laboral y, fuera de él, mediante semáforos. Además, se han colocado muros 'new jersey' en el eje de la calzada y se ha realizado un caballón con material de cantera para acoger posibles caídas de piedras.